Hubo pleno en la Junta General del Principado y una vez más se puso de manifiesto que sus señorías no son capaces de ponerse de acuerdo ni para recoger castañas. Menuda cursilada cuando una de sus señorías termina de hablar y los suyos le aplauden con la mano sobre la mesa en vez de aplaudir como Dios manda. Javier Fernández estuvo como torero en una faena de aliño. Cada dos por tres echaba la culpa al gobierno central y contestando a la portavoz del Partido Popular Mercedes Fernández le recriminó que mucho estar en la manifestación de ganaderos ante su despacho pero nunca la había visto con los mineros en una de sus protestas. Como va a haberlas, espero ver a los dos encabezándolas. Se nota que el general secretario Francisco Alvarez-Cascos tiene la habilidad de sacar al jefe del Ejecutivo asturiano de sus casillas hasta el punto que Javier Fernández hoy le pidió que no le mirara con sonrisa episcopal, anda ya. A Ignacio Prendes le reconoció que el pacto de legislatura está fenecido y éste, impávido, le contestó que “no faltan ideas, presidente; falta impulso e iniciativa”. Más irónico estivo el portavoz de Izquierda Unida Angel González cuando le dijo al presidente del Principado de que dejase de seguir a Mariano Rajoy recibiendo la contestación de Javier Fernández: “Usted es como Juan Palomo, se lo guisa y se lo come”.
Lo que me sorprende de esto debates tan bien remunerados es cómo se manejan las cifras sin que ninguna de sus señorías se ponga colorada. Alguien dijo en el curso del debate que en Asturias hemos perdido en los últimos tiempos 6.000 empresas y 60.000 empleos. Será pura rabia pero el presidente Javier Fernández dirigiéndose a Mercedes Fernández no se reprimió diciéndole: “Disfrute el monopolio de alborotamiento político con Francisco Alvarez-Cascos“. No me consta que a la abogada gijonesa le haya afectado la directa. Y es que como estamos ya en fin de semana cada mochuelo a su nido, a disfrutar del buen tiempo invernal. ¿Por que no, por ejemplo, esquiando en Pajares?.
El próximo día 13 de diciembre Gijón será escenario de la botadura del segundo atunero construido en los astilleros locales por encargo del empresario astur mexicano Antonio Suárez. A tal efecto vendrá una delegación empresarios de aquel país compuesta por 60 personas, destacados empresarios a los que hay que aprovechar agasajándoles como es debido. No espero menos ni de la alcaldesa Carmen Moriyón ahora que tiene como asesora a la ex secretaria municipal ni del presidente del Principado Javier Fernández. Si el consejero de Economía e Industria Graciano Torre, que hoy salvó la reprobación que pedía Foro con ayuda del PP, tiene que comprarse un traje en las rebajas, que lo haga. Antonio Suárez, al que no hace mucho le distinguimos con L´Amuravela de oro de la Asociación de Amigos de Cudillero, está claro que una persona que cumple con lo prometido y es era apostar por su región. Incluso se ha hecho importante accionista del Banco SabadellHerrero. Me consta que el conocido como el “rey del atún” está muy orgulloso de apoyar a su tierra, a la que nunca renunció, siempre que aquí cumplamos. Seguro que sí.