Ayer asistí al pregón del padre Angel García que inauguró las fiestas del Centro Asturiano de Oviedo. Lleno hasta la bandera para escuchar un discurso progresista y solidario que no gustó a todos -el público asistente era muy conservador-, que como me dijo un veterano socio del Centro “Vine a escuchar un pregón de fiestas, no un mitin de Zapatero”. Bueno, el caso es que el padre Angel continúa su incansable apostolado sea el lugar que sea y a modo de moderno Robin Hodd religioso busca dinero en los ricos para dárselo a los pobres. Ayer, como no podía ser de otra manera, nos sacudió las conciencias echando mano de argumentos solidarios, apoyándose en figuras como el cardenal Tarancón, al que admira, Gabino Díaz Merchan, Vicente Ferrrer o Martin Luther King. Elogió, por supuesto, al Papa Francisco, el Papa de los pobres. El padre Angel está convencido de que con este Papa la iglesia oficial va a cambiar para bien. Rebelde respecto a ella apenas tuvo una referencia para el actual arzobispo de Asturias Jesús Sanz Montes, ausente del acto, por cierto. Si se acordó, lo que sin duda debió hacer rechinar los dientes al presidente del Centro Asturiano Alfredo Canteli, del que lo fue durante muchos del de Madrid, Cosme Sordo Obeso, recientemente fallecido.

El alcalde de Oviedo en su actividad  estuvo institucional en sus palabras como no podía ser de otra manera. Ayer no dio abasto que Oviedo es una ciudad viva contra lo que algunos quieren hacernos creer. Por la mañana, acto de la ONCE y por la tarde inauguración de la exposición sobre los guerrilleros antifranquistas promovida por Gerardo Iglesias e Izquierda Unida y fiesta en el Centro Asturiano. A mediodía platiqué sobre política municipal y no tan municipal con el vice alcalde Jaime Reinares y un servidor. Le dije que no veía en estos momentos lo de un museo de motivos religisosos. Además de no creer en el turismo religioso pienso que hay otras prioridades y ya contamos con la Catedral Metropolitana -en estos estoy de acuerdo con la consejera de Cultura Ana González, para mi la más efectiva del actual gobierno asturiano-.

Volviendo a la fiesta del Centro asistieron al pregón del padre Angel, entre otros, el presidente de FADE Severino García Vigón, seguido de su fiel escudero José Luis Alvarez Almeida, presidente de la Hostelería, el presidente de la construcción y de La Cruz de los Angeles Serafín Abilio Martínez, al que el padre Angel tiene un gran aprecio y nuestro pobre más emblemático, Manolín “el gitano”, hecho un pincho, sombrero incluído, recordándome al actor George Raft en aquellas películas de cine negro que veíamos en nuestra infancia. Manolín, que algo se trae entre manos, creo que pidió un autógrafo al psicoesteta Ramiro Fernández ya con la maleta preparada para acompañar a “La Roja” a Finlandia. El portavoz del PSOE en el ayuntamiento Alfredo Carreño, aún repondiéndose de la fiesta de la rosa, tampoco faltó al acto que sabe que tiene primarias a la vuelta de la esquina; ni los de Foro, solo eché en falta a concejales de IU, que lo de la Iglesia no les va así como tampoco clubes como el Centro Asturiano. Si vi al ex político Ramón García Cañal, hoy ejecutivo de la empresa pública Tragsa -la que está desaparecida de la vida local es otra ejecutiva, Isabel Pérez Espinosa-, y al coronel Rafael González Crespo, ex delegado de defensa en Asturias. Este militar hoy jubilado pero en plena forma física y mental es una de las personas mejor conocedores de temas militares a nivel internacional, especialmente referidos a Rusia. Tanto es así que dentro de unos días se nos va para Moscú a tener intercambios con colegas de aquel país sobre defensa y armamento. Rafael González Crespo es asesor internacional de CIC (Consulting Informatico) y no descarto que el mismísimo Putin tenga en cuenta sus opiniones profesionales ahora que se va a Moscú en vísperas de la visita de Obama. Le he prometido leer esta misma semana su último libro titulado “Cambio hoz y martillo por  4×4 con lunas tintadas”.

El padre Angel con la elegancia de su verbo curtido en mil batallas lanzó algún que otro dardo a la clase política si bien, supongo, el senador Isidro Fernández Rozada, también presente en el acto, no se dio por aludido. El padre Angel dijo que 39 diputados de la asamblea de la Comunidad de Madrid acuden al pozo del Tío Raimundo a echar una mano en los comedores sociales. Aquí, reverendo, la verdad, creo que nuestros políticos son tan cicateros que solo piensan en echar una mano a nuestras carteras. “Creo en Dios, los hombres y la Virgen de Covadonga, patrona de nuestra tierra” dijo el cura de Mieres.

Y tras los discursos, imposición de bandas a la reina y damas de honor de la fiesta y concierto a cargo de la Orquesta Langreana de Plectro. Desciendo de la falda del monte Naranco y me encuentro paseando por la ciudad al gran Graciano García en compañía del empresario astur mexicano Antonio Suárez. En tan veraniega noche Vetusta está preciosa y al hombre que con sus encargos ha contribuido de manera decisiva a revitalizar la construcción naval en Asturias se le ve feliz de pasear por la calle Uría en compañía de padre de la Fundación Príncipe de Asturias. Un privilegio que no está al alcance de cualquiera.