El sueño del olvido

Encuentro en el auditorio Príncipe Felipe al diputado de Izquierda Unida por Asturias Gaspar Llamazares. Junto a su señora busca entradas para ver “Nosferatu” con música de Oviedo Filarmonía, dirigida por Nacho Paz, que ayer tarde fue todo un éxito en el verano ovetense. Según me cotillea mi espía preferida, la XPXIII, Gaspar Llamazares es el único diputado del Principado que utiliza el ALSA con paradas de aquí a Madrid y viceversa. Sigue combativo y consciente de que las encuestas les dan un importante aumento para las próximas. Además, como ahora los locales de IU están en la plaza de la Catedral, tras el lío habido con el PCA por los de la plaza América, encontrarse a la sombra del lugar desde  cuyo campanario don don Fermín de Pas observaba con su catalejo la pecadora sociedad ovetense, le inspira. Esa izquierda abierta que Gaspar Llamazares propugna como movimiento dentro de la coalición tiene futuro al decir de los expertos. Podrá estar uno de acuerdo o no con sus ideas -yo no lo estoy- pero justo es reconocer su capacidad de trabajo, su vocación política y su preparación. Si los suyos van para arriba no descartaría que Izquierda Unida le colocase en las próximas autonómicas al frente de su candidatura.

Cara a las próximas elecciones municipales y autonómicas la gran baza que tiene el PSOE asturiano es poner con orden y acierto en marcha el nuevo hospital central en Oviedo. Los problemas económicos y la falta de tijeretazos a los gastos secundarios decididos por parte del gobierno autonómico que preside en minoría Javier Fernández hace que no soplen buenos vientos para la sanidad publica del Principado, hasta ahora una de las mejores y más valoradas de España. La cosa económica anda tan mal que hasta ha comenzado a circular por ahí un tan tan sobre una próxima fusión de las dos residencias sanitarias, Mieres y Langreo. Con la población de las cuencas centrales en alarmante descenso muchos opinan que construir una nueva residencia en el valle del Caudal ha sido un error pero como ya está hecho a la FSA y al gobierno regional no les quedará más remedio también que inaugurarla antes del 2015. Menos mal que como aquí el gobierno es socialista no hay riesgo de privatizaciones, si de aumento de la presión impositiva, como está pasando en Madrid, veremos con que resultado.

Empresarios del sector del metal me comentan que el Ministerio de Defensa, donde un asturiano, Pedro Arguelles, está de segundo, está desguazando, tras el cierre, la excelente maquinaria que tiene la recientemente clausurada Fábrica de Armas en La Vega.  Tornos de gran precisión valorados en miles de euros se largan por unos cientos. El caso es que los ciudadanos continuamos sin saber cual va a ser el futuro de tan magnífico solar, dando, por el momento, como callada por respuesta por parte de nuestros políticos más preocupados en mantener sus prebendas que en otra cosa. Y es que me preocupa eso, que va a pasar con dicho solar y con el del antiguo complejo sanitario de El Cristo al que habría que añadir el del cuartel de la Policía Nacional y la plaza de Toros que año tras año, ¿Y van?, duerme el más profundo sueño del olvido. Espero no ocurra lo mismo con la antigua fábrica de armas, ni con la ronda norte, ni con el Calatrava, atacado éste apenas nacer por la crisis y la mala gestión.



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