Con la firme convicción de que el Gobierno de la República ha tomado una decisión trascendental para acelerar el desarrollo de nuestro país, este lunes envié al Senado de la República la Iniciativa de Reforma Energética.
Esta Reforma representa una de las más grandes oportunidades para México de los últimos años. Si aprovechamos esta gran oportunidad se crearán cientos de miles de nuevos empleos y con mejores salarios.
Si llevamos a cabo esta Reforma bajará el precio de la luz y del gas; igualmente bajará el precio de los fertilizantes y, en consecuencia, nuestro campo producirá más, habrá más alimentos y a mejores precios.
Hace 75 años, en Palacio Nacional, el Presidente Lázaro Cárdenas llevó a cabo la Expropiación Petrolera.
La Reforma que he enviado al Senado retoma palabra por palabra el texto del Artículo 27 Constitucional del Presidente Cárdenas. El espíritu de esta Reforma recupera el pasado para conquistar el futuro.
Con la Reforma que propongo, el petróleo y los demás hidrocarburos seguirán siendo de los mexicanos. Los mexicanos seguiremos siendo los únicos dueños de la renta petrolera.
Con esta Reforma PEMEX se mantiene como una empresa cien por ciento propiedad de la Nación.
PEMEX no se vende ni se privatiza. PEMEX se fortalece y moderniza.
En su momento, el Presidente Lázaro Cárdenas afirmó que el Artículo 27 no implicaba que la Nación abandonara la posibilidad de admitir la colaboración de la iniciativa privada.
Congruente con esa visión, la Reforma Energética que he presentado permitirá al Estado mexicano contratar a particulares cuando así convenga al interés nacional y con ello generar energía más barata para todas las familias mexicanas.
El Pacto por México ha generado el clima positivo, de diálogo, entendimiento y acuerdo político que esperaban los mexicanos.
Por ello, confío que el debate de esta iniciativa de Reforma al interior del Congreso de la Unión se centrará en cómo sí transformar a México, en cómo sí modernizar a nuestro sector energético, en cómo sí cambiar lo que hoy nos ha impedido avanzar como país.
Es tiempo de aprovechar al máximo los recursos energéticos del país.
Ese es el propósito de la Reforma Energética: Beneficiar a los hogares, crear empleos y fortalecer la soberanía nacional.
Este es un gran momento para México. Es tiempo de ir hacia adelante, de aprovechar la gran oportunidad que tenemos y de iniciar juntos una nueva y mejor etapa de nuestra historia.
*Presidente de los Estados Unidos Mexicanos