Asturias es la autonomía de España con mayor caída industrial pero es la región donde más rápido se puede llevar a cabo un divorcio. Curiosos datos. Lo de la caída industrial es importante y supone, ni más ni menos, el fracaso de las tres patas representativas de nuestra sociedad: El Gobierno regional, la patronal y los sindicatos. Mucho dar la cháchara, mucho salir en los medios de comunicación abogando por la creación de empleo y riqueza pero, la verdad, nada de nada. Eso sí, en verano, serpientes de verano por doquier, no solo la que asusta a los vecinos de Nembra a modo de cuélebre tradicional. Por ejemplo, ese parque que dicen que Arcelor Mittal quiere construir en el puerto de El Musel con una inversión del orden de los 200 millones de euros. Yo del indio no me fío y si mantiene la producción de acero en el Principado es porque los trabajadores, lo mismo que ha ocurrido con los mineros de Victorino Alonso, han tenido que bajarse los pantalones, o más bien bajarse el sueldo y aumentar la jornada de trabajo lo que ya no ocurre ni en Tanzania.
A todo esto, como era de esperar, la actividad en FADE y en la Cámara de Comercio de Oviedo está a relantí. Ya saben que Severino García Vigón, como Sabino López en el Real Oviedo, no quiere dejar el cargo ni con calzador. Si no recuerdo mal no hace muchas fechas se vendió a la opinión pública la inauguración y puesta en marcha este mes de la nueva Escuela de Hostelería en el polígono ovetense de Olloniego con un magnífico edificio construido aprovechando los fondos mineros y ya completamente equipado; el caso es que el problema no fue construirlo, Europa soltó la grava, si no es ahora ponerlo en funcionamiento y luego mantenerlo vivo, algo muy costoso en estos momentos para la propia Cámara y para Asociación de Hostelería del Principado que preside José Manuel Alvarez Almeida, uno de sus principales valedores empresarialmente hablando del doblemente presidente García Vigón. El Principado, así como el Ministerio, con varias escuelas de formación en hostelería funcionando y bien por toda Asturias se niega a poner un euro en este proyecto ya longevo pero no operativo. Por Dios, ¿Cuando se comenzará a hacer las cosas bien en esta región?. ¿Cuando se van a pedir responsabilidades?.
Ha comenzado el proceso electoral en la cooperativa Central Lechera Asturiana. Cuenta con 1.600 socios que aportan leche y 12.000 socios durmientes. El actual presidente, Bertino Velasco, quiere continuar otros seis años más. Normal, ya conocen mi teoría de que aquí nadie quiere bajarse de la piragüa pero tengo la sensación de que su candidatura no será, como pretende, única y tendrá contrincantes. Pienso que los efluvios del fundador y durante tantos años presidente, Jesús Sáenz de Miera, continúan por la factoría de La Granda. Los que ya no están, desde luego, son los de Pedro Astals, el catalán que trajo Saénz de Miera para poner orden, y lo consiguió, en la Central Lechera pero que al final fue derribado por su falta de sentimiento regional y asturianismo empresarial. Supongo que uno de los comunicadores que mejor conoce el tema, el editor de “El Fielato” Borja Márquez, nos tendrá informados paso a paso de que lo ocurra en una de las principales empresas de Asturias y que más contribuye a propagar con prestigio la marca de nuestra tierra. Espero también que tanto Cajasur, quiero decir Liberbank, como la Caja Rural Provincial, con importantes intereses económicos en la compañía, estén atentas a los acontecimientos, aunque de Liberbank no me fío un pelo, que conste.