Después de lo de ayer, en el Congreso, viendo el apoyo de todos tus incondicionales, sus aplausos, su unanimidad y fervor en cada una de tus intervenciones, no es raro que te hayas ido arriba. Tienes a los diputados de tú Partido entregados, Mariano, y tanta gente, en sincera comunión con tus explicaciones, no puede estar equivocada. Si solo fuesen algunos, tal vez; pero tantos, que son todos, no.
Gente preparada, con estudios, cabezas lúcidas, con criterios propios; diputados que llenaron el Congreso provenientes de las más lejanas tierras de la nación, unos de Valencia, otros de Andalucia, o de Extremadura, otros incluso de las tierras rebeldes fronterizas con Francia; practicamente de todos los lugares y, por supuesto, también de tú feudo gallego.
Gente que, en su totalidad, dejó a sus familias abandonadas el primer día de las vacaciones para estar a tú lado, Presidente; gente sacrificada al servicio de la defensa de una causa común. Tanta gente, repito, no puede estar equivocada. Mariano Rajoy, yo también estoy convencido de que no mientes (antes de mentir habrías dimitido), que no sabes que es una caja "B" y que no te enterabas de nada.
A partir de hoy, Mariano, "Conmigo puedes contar siempre y sabes que te estoy agradecido por el apoyo que personalmente...". Fin de la cita.