Hartos y hartas ya de la falta de democracia y de transparencia, de la vulneración de nuestros derechos sociales laborales; de la pérdida de los Servicios Públicos (Educación, Sanidad, Vivienda, Empleo, Dependencia, Servicios sociales...), de la corrupción, de la deuda ilegítima, de los recortes, de las privatizaciones y de un sin fin de despropósitos más..., se ha convocado, del 23 al 30 de junio, un PLEBISCITO CIUDADANO en todo el país, así como en parte del extranjero (Bruselas, París, Londres...) con el que se mostrará mediante nuestro voto y firma cual es la voluntad de la ciudadanía.
No servirá para nada, como para nada sirvió la Iniciativa Legislativa Popular para la reforma de la ley hipotecaria. Quienes hacen las leyes hacen la trampa que les permite saltársela. ¿Cómo van a legislar contra la corrupción quienes tienen en sus filas más de 2.000 imputados? ¿Cómo van a entender el problema de la vivienda quienes cobran dietas por ella mientras se la paga el partido?
No servirá para nada, como para nada sirvió la Iniciativa Legislativa Popular para la reforma de la ley hipotecaria. Quienes hacen las leyes hacen la trampa que les permite saltársela. ¿Cómo van a legislar contra la corrupción quienes tienen en sus filas más de 2.000 imputados? ¿Cómo van a entender el problema de la vivienda quienes cobran dietas por ella mientras se la paga el partido?
Un 93% de españoles desconfían de los partidos y creen que la corrupción en España se practica a gran escala desde las instituciones, tanto estatales como locales. Cómo no van a desconfiar si el tesorero de un partido es un tramposo, un mentiroso y un cínico, eso sí, con 47 millones en cuentas suizas y defraudando a Hacienda. Como sus predecesores, eso sí. Y la familia del rey, qué me dicen de esas ventas y contratos falsos, de esa millonada por la cara (nunca mejor dicho)
Así que opinaremos, por supuesto, dejaremos constancia de nuestra opinión y, tal vez un día, los libros de Historia escriban que el comienzo del siglo XXI estuvo marcado por la participación ciudadana, las asambleas de barrio, los plebiscitos populares. Que ante la incapacidad de los gobernantes para resolver la crisis creada por ellos mismos en beneficio de espurios intereses, el pueblo soberano tomó la calle e hizo suya la palabra. Y que fue la marea ciudadana (no las mareas, divide et impera, aviso a navegantes) la que habría de propiciar tan ansiado cambio.
Yo voto con ilusión, que quieren que les diga. Ahí dejo la papeleta para que usted se lo piense.