Acudo por primera vez a la reunión que todos los jueves mi antiguo compañero de bachillerato en los Dominicos de Oviedo, José Antonio Viso, ya jubilado tras haber sido un destacado ejecutivo de Cajastur, organiza en su localidad natal de Santullano, en Mieres, en un magnífico zulo que ha preparado en los bajos del edificio en donde nació, justamente frente a la estación de RENFE, reunión que concida a diez amigos de profesiones variopintas pero unidos por la amistad y el deseo muy loable de que las cosas mejoren en Asturias. Por lo que comprobé, y lo que me contaron, se habla de todo menos de fútbol, aunque no está prohibido, en torno a un vino, mejor sidra y sabrosas viandas asturianas para la ocasión.
En “Tertulia 10″ me reencontré con viejos conocidos como el magistrado Tomás Maillo, el médico turonés José María Soto con el que coincidí en HUNOSA y al que le recuerdo el día de la inauguración del polígono de La Cuadriella en que siendo presidente de la comisión de vecinos de dicha localidad le presenté al mismísimo Francisco Alvarez-Cascos en persona -era entonces ministro de Fomento- y al que le expuso sin cortarse un pelo las carencias de Turón, la localidad que llegó a tener 9.000 mineros y hoy solo es residencia de jubilados, que hasta la empresa farmacéutica DIASA instalada en el citado polígono se fue al carajo. Me prestó también encontrarme con Aquilino Díaz, asimismo pre jubilado de HUNOSA y que ahora asesora a la AMSO y al grupo municipal socialista del ayuntamiento de Oviedo que encabeza el bueno de Alfredo Carreño. También me reencontré con Enrique Iglesias Díaz, profesor jubilado del Instituto de E.M. de Moreda y párroco de Piñeres, Nembra y Soto de Aller. Ya saben que en Asturias además de otros déficits lo hay, y muy acusado, de curas. Enrique Iglesias, que fue número uno de su promoción en el Seminario ovetense, siempre me sorprende por su cultura, sus ponderados comentarios y un dominio diría que espectacular del latín. Escucharle dialogar con otro de los asistentes, el ex dominico, abogado y profesor de la Escuela de Magisterio Jacobo Hevia Losa, fue una delicia. De Hevia Losa había oído hablar pero hasta ahora no tuve la ocasión de conocerle en persona. Siempre me decían amigos comunes que era un maestro en resolver pleitos entre matrimonios, separaciones por la Iglesia y también, supongo, por lo civil, además de hacer gala de una vasta cultura no solo gracias a su buena formación sino al impenitente lector que es.
En “Tertulia 10″ en esta última reunión de temporada -no se reanudará hasta octubre- conocí asimismo a Javier Merino, ingeniero técnico de minas, a Gustavo Salinas, director de una empresa de diseño y páginas web, al físico José Casado, natural de Turón y residente en Manchester (Gran Bretaña), al químico Raúl Piedra, y a Alberto, jubilado del Banco Herrero, del que el anfitrión Viso me cuenta que es un buen mago. Aunque Tomás Maillo y un servidor termináramos por los suelos – no por culpa de algún brebaje esotérico sino porque las sillas que encargó Viso no estaban preparadas para aguantar a chicarrones del norte- la tertulia en cuestión estuvo de lo más interesante y el propio José Antonio Viso me informó como de ella hace unos meses surgió un grupo para estudiar y fomentar proyectos empresariales que puedan contribuir al desarrollo de la comarca del Caudal. Técnicos, excelentes profesionales aún en la flor de la vida, que de manera desinteresada, por supuesto, quieren contribuir a que mejore su tierra y, si es posible, crear empleo.
Ese gesto me recuerda a la organización SECOT en la que he ingresado hace poco y que bajo la tutela de la Cámara de Comercio de Oviedo se dedica a asesorar a emprendedores desorientados o en dificultades. Precisamente acaban de celebrarse las elecciones para presidente de SECOT Asturias -en octubre próximo se celebrará el 20 aniversario- resultando elegido Juan Alberto Rodríguez González. Precisamente el día de la votación fue presentado a la asamblea de miembros de SECOT el último fichaje, el psicoesteta Ramiro Fernández. No me cabe duda de que todos mejoraremos de imágen.