“Cuando el río suena, agua lleva”. Cuando el personal sanitario y docente se moviliza, no minusvaloren los motivos que les llevan a mantener una actitud tan firme y continuada. Se trata de quienes desempeñan funciones que se caracterizan por su desprendimiento, su generosidad, su solidaridad humana.
Los pacientes y los estudiantes son grandes destinatarios de los responsables públicos. Todo lo que les afecta puede tener consecuencias difícilmente reversibles.
No contemplen estas “mareas” como si ustedes poseyeran la verdad y todos los esfuerzos “marinos” fueran vanos.
Escuchen, atiendan, conversen… y rectifiquen cuando deban. La salud y la educación son temas en los que la obcecación y la imposición siempre acaban perdiendo.
Ténganlo en cuenta.