La música fue siempre un referente de protesta social con los cantautores, con grupos que realizan música independiente donde quieren demostrar su forma de opinar o vivir, los grupos musicales aportan a la sociedad una opinión camuflada de la realidad social, como en su momento hizo un grupo asturiano llamado “Ilegales” con una música que llegaba a una movida social de cambio.
Pero hoy la música es otra, la sociedad pasa por momentos de angustia social, donde nuestros oídos no se permiten de forma diaria escuchar melodías que relajen el cerebro y el carácter, todo lo que nos rodea a diario nos transmite sensación de angustia y miedo, porque la sociedad inmersa en este sistema solo puede sobrevivir con el trabajo, que muchos de nuestros conciudadanos pierden todos los días, colapsando un sistema de locura colectiva llamado “consumo”.
Cuando me refiero a los Ilegales, no es al grupo musical que nos deleito con su rock independiente, es a la otra parte del significado real de la palabra, que marca cuando algo o alguien está fuera de la ley, que normalmente nos están demostrando que los que tienen que dar ejemplo son los más ilegales del mundo, poniendo constantemente en peligro nuestro sistema social y muchas veces nuestras propias vidas.
El trágico accidente de la macro- fiesta Madrileña, pone en entredicho la legalidad y la seguridad de muchos edificios construidos con nuestros dineros y bajo sospecha de que no cumplen las normas de seguridad , pero lo que tenemos claro es que costaron miles de millones, que se dieron a amigos de los cargos que representan nuestro sistema social y que la cagada la pagaremos todos, pero es de extrañar que esas exigencias a otros colectivos industriales cuando quieren abrir unas instalaciones para una actividad sean tan duras y paralizantes, y que aquellos que las exigen no las aplican para sí, eso demuestra el grado de corrupción interno de un sistema que cada día se pone más en evidencia.
Hoy podemos hablar de seguridad, de responsables, de coordinación de la empresa, de depurar responsabilidades, de deudas de la empresa, de amiguismo, de lo que queramos y llenar hojas de prensa diariamente, pero lo que está muy claro y es lo más doloroso, es que jóvenes en la plenitud de la vida con futuros seguramente brillantes, fallecieran por presuntas imprudencias de los que verdad tienen que velar por la seguridad ciudadana.
En este país todos los días se demuestra que nadie es culpable de los accidentes o siniestros vinculadas a fallecimientos de personas , si son de avión, la culpa es del piloto muerto, si son del tren es del conductor muerto, si son del coche es del conductor muerto, si son en recintos propiedad del estado o instituciones, la culpa es del que fue al concierto o al evento, nunca nadie que tiene un cargo de responsabilidad social, es culpable, no lo digo yo , lo dicen las estadísticas de resultados judiciales de casos vinculados a este tipo de siniestros, por consiguiente para que vamos perder el tiempo en hacer leyes, si al final sabemos de antemano que la responsabilidad caerá siempre sobre la persona que perece en esos accidentes y si no que se lo pregunten a los familiares de los asesinados por el terrorismo, los del accidente de barajas o los padres que perdieron a sus hijas por asesinatos o violaciones, párense, cojan estadísticas de resultados judiciales y analicen de verdad que es lo que pasa en nuestra sociedad, se darán cuenta de la grave situación y de que los culpables no existen.
También tenemos que tener claro, que los responsables de los ayuntamientos tienen vida privada y que esta es prioritaria, aunque se tenga una emergencia local importante que lleva incluida la muerte de menores, incumpliendo uno los reglamentos básicos que tenía que tener el macro-concierto, pero la vida privada como decía, es prioritaria. Su sueldo, su imagen, sus mentiras en las comunicaciones, o su apoyo a los organizadores de ese evento trágico, ponen en relieve que ellos no se exigen lo mismo que exigen al resto de la ciudadanía o empresas, por consiguiente están dentro de una posible ilegalidad , que si miramos el código se lo tendrían que aplicar, igual que aplican multas a los demás por incumplirlas reglas que ellos mismos establecen, veremos si se ponen ellos mismo una sanción por incumplimiento de normativa, será que no y más ahora que están jodidos de pasta, bueno como escucharon de su boca , nadie dimite o es decir lo mismo que nadie es culpable, siempre se cumplen las estadísticas, seguimos igual.