No hay cosa que más apasione al ser humano que el “juego”, los datos de nuestra historia nos revelan que nuestros ancestros también le dedicaban tiempo al juego, aunque a veces era muy duro, era más para demostrar quién era el más fuerte, que por divertirse , pero jugaban.

Una vez que evolucionamos e inventamos el dinero como moneda de cambio, ese juego pasó a convertirse en el juego de la avaricia, hoy en nuestro tiempo esta no tiene fin, llevando a muchas personas a la misma pobreza que tenían nuestros antepasados, pero esta vez por nuestra inconsciencia personal, ya que por preparación o conocimiento no será.

 El juego económico que vivimos en estos tiempos, hacen que los jugadores que tienen posibilidades económicas  estén llenando sus arcas de más dinero, ya que tienen a una masa de gobernantes comprados para que el juego tenga muy pocos jugadores y los beneficios del mismo se repartan entre pocos. Como todos sabemos en el juego siempre tiene que ganar alguien y perder otros, los perdedores somos los ciudadanos y los ganadores los especuladores financieros o banqueros.

Cuando yo estudiaba, la asignatura de matemáticas tenía un fin, hoy con este juego creado por cuatro espabilados ya se me escapa cómo funciona la asignatura, más viendo que tenemos un banco intervenido que sube y baja su cotización bursátil como los dientes de una sierra, un banco que esta con una deuda impagable, que esta intervenido, que su valor es cero, que nos costo de momento a los Españoles 23000 millones de euros y nuestro regulador financiero deja todavía que este en el mercado de la bolsa.

Esta entidad en quiebra absoluta, es el juguete de la especulación consentida por la CNMV, cuando esta entidad debería de estar retirada su cotización en  bolsa por sus grandes problemas de liquidez, para proteger aún más su deterioro,  que todavía no le llego el dinero de Bruselas y no se sabe si le llegara. Pero los reguladores consienten más burbujas que pagamos todos y que a ellos no les cuesta un duro, al contrario con la información privilegiada que tienen seguro que alguno se aprovechara encima. Los españoles no vemos que nos están tomando el pelo, que pagaremos con tres generaciones la deuda que estamos consintiendo que nos endosen, que a la gente de mi edad tendremos  una pobreza absoluta a la hora de nuestro retiro y ahí sí que no tendremos margen de maniobra para protestar, ya que encima seremos muy viejos.

Lo que se sale del concepto matemático y de la racionalidad, es que gente invierta en esa entidad, y que muchos irresponsables  minoritarios sigan los pasos de los grandes especuladores, para que después estén enganchados con temas financieros que no podrán canjear o que no tienen  valor ninguno, que podemos denominar corralito a la española, “tu mete que yo no te dejo sacar”.

Si estos personajes invirtieran ese dinero  que les sobra, en la idea de un hijo, amigo, o apoyaran proyectos para relanzar microempresas, este país no tendría los parados que tiene y la solvencia de estas pequeñas empresas seria el arma para crear empleo, tan necesario como la propia supervivencia de nuestra nación. Pero no es así, prefieren que se lo robe una camada de impresentables o comprar acciones de un equipo de futbol donde su presidente fumara y comerá de puta madre a cuenta de los forofos o aficionados del futbol.

Para esto si se pide apoyo, pero para sacarnos del hambre no

Camino irregular, tropiezos en piedras, caída segura,

NO JUEGUEN, perderán siempre , ya que el juego tiene trampas