He asistido a mi primer mitin en esta campaña electoral, el de esta tarde en el auditorio protagonizado por Francisco Alvarez-Cascos, y mañana en el mismo escenario asistiré al último, el de UPyD. Foro Asturias llenó la sala principal, anfiteatro incluído, del auditorio. Un público con muchas mujeres, jubilados y escasez de jóvenes. A la entrada, en el hall, el último libro del presidente del Principado que firmó ejemplares al termino de su intervención. Un propio repartía banderas y el ex alcalde de Candamo Herminio Fernández, que ahora vive en Grado, intentando convencer en la plaza de La Gesta a su buen amigo y otrora compañero de partido, el senador del PP Isidro Fernández Rozada, para que se afilie a Foro que según Herminio en su día estuvo a punto el sobrino de la tía Nemesia. Detrás de mi butaca un forofo me dice por qué no estoy en Gijón escuchando a Felipe González. El presidente de los comerciantes Severino Alvarez Zaragoza no se pierde mitin de FAC -Foro coincide con las siglas de su patronal- igual que el presidente del Centro Asturiano de Oviedo Alfredo Canteli a quien le tienen reservada la organización butaca en las primeras filas. Sin embargo el que sí estará mañana en las instalaciones del Centro en el monte Naranco para asistir a la inauguración del pabellón infantil será el alcalde Agustín Iglesias Caunedo. Aquel dirigente de UCD Toni Fidalgo, que fue vicepresidente de la Diputación, no para de aplaudir al general secretario. Lo mismo que el pintor Manolo Linares, el empresario Manolo Cosmen, otro colega, Roberto Ferrero, el abogado José Manuel Montes,  o el diputado Enrique Alvarez Sostres que cada vez viste con mayor elegancia rayando en la exquisitez, al igual que aquel antiguo roquero del Partido Popular el abogado Tono Landeta. Claro, la mayoría de las caras que me resultan conocidas son de los tiempos en que el Partido Popular situó en la Moncloa a José María Aznar. Saludo al profesor José Girón pero ni me ve. Hombre, el vice secretario de Infraestructuras Juan Vega no para de dar abrazos mientras se ajusta el nudo de su elegante corbata. Quien le vió y quien le ve. Esto de tocar poder en politica hace milagros.

Abre boca una pareja de jóvenes con argumentos un tanto forzados. La mayoría de los que escuchamos podíamos ser sus abuelos. Seguidamente hace uso de la palabra el portavoz de Foro en el ayuntamiento de Oviedo. Esta vez comedido, leyendo y reconociendo que en otros mítines se había equivocado por sus excesos verbales. De sabios es reconocerlo y es que Arturo González González de Mesa, atentamente fotografiado por la mágica cámara de Jesús Farpón bajo la atenta mirada del jefe de prensa Pedro Ramos, poco menos que vino a decirnos que quien gobierna el ayuntamiento es él tras haber expulsado del mismo a su cordial enemigo Gabino de Lorenzo -ten cuidado, che, que ahora es delegado del Gobierno y tiene las fuerzas del órden a sus órdenes- mientras que se refiere a Roberto Sánchez Ramos, sin citarle por el nombre, como un concejal que cada dos por tres se va a Cuba donde los derechos humanos brillan por su ausencia. Tengo la sensación de que doblemente González no sabe que Rivi se casó en octubre en el consulado español en Nueva York, ciudad que le priva aunque probablemente también en ella los derechos humanos no estén tampoco muy respetados.

Tras el concejal, la diputada Cristiana Coto. Para mi el auténtico descubrimiento en esta corta legislatura de Francisco Alvarez-Cascos que la ha colocado de dos en su lista a la Junta General del Principado. Melena rubia, radiante bajo los flases, irónica, excelente dicción, me recuerda a Isabel Tocino con treinta y pocos años. De Javier Fernández dijo que tiene miedo. Y quien no con la que está cayendo; de su antiguo partido, el Popular, que está haciendo una campaña extravagante y a Cristóbal Montoro le calificó como Pinocho; vamos, que le crece la nariz por sus mentiras. A Mercedes Fernández ni citarla. Debe de ser una consigna por aquello del pacto de La Cibeles.La diputada estaba para la mano y como viene siendo habitual en los dirigentes de Foro, hala, a meterse con La Nueva España. No me resisto a contarles el chiste que soltó, que para esos están los 100.00o parados en Asturias, para chistes. Más o menos esto dijo Cristina Coto: “Viene el Papa a Asturias y el presidente del Principado Francisco Alvarez-Cascos le acompaña a Covadonga. Tras visitar la cueva el Papa le pide subir hasta los lagos. En el Enol Su Santidad ve una pequeña barca varada antojándosele dar un paseo ella en compañía de Alvarez-Cascos. Llega una ráfaga de viento y el solideo del Papa cae al agua. Alvarez-Cascos se baja caminando sobre las aguas, lo recoge y caminando sobre las aguas retorna a la barca para entregárselo al Papa. ¿Como titularía La Nueva España? -se pregunta Cristina Coto- Pues Alvarez-Cascos no sabe nadar”. Fuertes aplausos y regocijo de los asistentes.

El general secretario elegante y de buen humor despierta la pasión del público al salir al escenario. Francisco Alvarez-Cascos, en su línea habitual, gasta más de 20 minutos de su discurso en atacar a La Nueva España incluso volviendo a sacar el tema del fallecido  José Vélez y su relación con dicho periódico hace veinte años. Nada de referirse a Mercedes Fernández y sí a Gabino de Lorenzo “Que fue mas casquista que nadie hasta el punto que quiso poner mi nombre a este auditorio“. También con sorna dijo que cuando un amigo de fuera venía a Asturias y le preguntaba a otro “¿Que está pasando en nuestra tierra?” éste le contra pregunta diciendo “¿Quieres la verdad o lo que publica La Nueva España?”. Por fin, menos mal, al final de su intervención aludió a algunos de los temas del programa de Foro pero sin entrar en capítulos importantes como Cajastur, pacto con el PP, privatización de SEDES, fondos mineros, etc. Brazos en alto Francisco Alvarez-Cascos terminó exclamando a lo Fidel Castro “Vamos a ganar con mayoría suficiente”. Pronto lo sabremos.