Es un placer para mí participar en el acto de apertura de Jardinequip 2012, el Salón de la Jardinería, la Flor, Complementos y Mascotas, y quiero agradecer expresamente al Presidente de la Cámara de Comercio de Avilés, D. Francisco Menéndez Díaz, por su invitación para inaugurar la VI edición de este Salón.
La innovación que supone incluir las I jornadas caninas y felinas permite que hoy disfrutemos aquí de más de 50 expositores, que deja muy lejos la cifra del año anterior. La adaptación es clave para lograr la supervivencia y expansión de eventos como éste.
A nivel mundial hemos asistido a un proceso que en España se dio en los años ’50. Desde 2008 la población urbana mundial es mayor que la población rural. Naturalmente este proceso no es homogéneo en todo el planeta, ni en todos los territorios, pero si alerta de un cambio en la forma de vida y por lo tanto en la concepción del espacio y su entorno.
La población urbana demanda áreas donde escapar y recrearse, y es ahí donde intervienen los espacios verdes, los parques y los jardines. Son lugares donde los ciudadanos con poco tiempo para el contacto diario con la Naturaleza, buscan algo que les devuelva a sus inicios.
Cuando la Biblia hace referencia al origen del Hombre lo vincula al Jardín del Edén, considerándolo a partir de entonces como el estadio ideal humano, no en vano al ser expulsados del Jardín, se le expulsa del Paraíso.
Esta imagen idílica del jardín, como zona de descanso y reposo, ha acompañado a toda la cultura europea a lo largo de su historia, incluso en los periodos de explosión demográfica urbana, en los siglos XIX y XX. A día de hoy, no sería concebible una ciudad sin parques y sin jardines, sin zonas verdes donde descansar y pasear.
Asturias no es una excepción a todo este devenir, y más del 80% de la población vive en la zona urbana, y sólo en el famoso triángulo de Gijón, Oviedo y Avilés vive más del 50% de la población asturiana. Sin embargo, toda esta población urbana sigue vinculada, de una manera muy especial a la Naturaleza, el Paisaje y los animales.
No es de extrañar, por tanto, que cada vez se incremente más la producción de planta ornamental en Asturias, especialmente los últimos años, donde pese a mantener la superficie cultivada, la mayor profesionalización de nuestros floricultores ha permitido obtener mayores rendimientos.
Tenemos, sin embargo, un reto por delante: la producción de planta ornamental para flor cortada, principalmente claveles, y que puede ser una buena alternativa a la hora de producir en zonas urbanas y periurbanas.
Las demostraciones de arte floral, a cargo de la Asociación de Floristas de Asturias, y el concurso de jardines con que contará el Salón son un buen ejemplo del cada vez mayor interés que genera este sector y del buen hacer de los concursantes.
Al igual que los jardines, los animales de compañía o mascotas acompañan al hombre desde los albores de la sociedad, y sin los cuales no habríamos podido llegar a ser hoy lo que somos. Tanto social como emocionalmente.
Perros y gatos jugaron desde la Antigüedad un papel fundamental en el proceso de la civilización, y en muchos casos, místico. La pasión que suscitan estos animales es tal que en 1850 surge en Francia la primera ley de protección de los animales, prácticamente al mismo tiempo que las colonias europeas se prohibía la esclavitud.
Desde ese momento histórico, los concursos y exposiciones, donde participan animales de alto valor genético, se han convertido en una actividad favorecedora del intercambio y la difusión de los avances en la mejora genética de los animales de compañía.
Así, los concursos caninos y felinos, ya sean de belleza, de trabajo, de obediencia o de agilidad, fomentan y protegen los animales de pura raza, logrando así unos estándares que permiten identificar y valorar las aptitudes individuales y raciales.
No podemos tampoco olvidar las exhibiciones de deportes caninos (agility, dogfrisbee, habilidades caninas,...) que evidencian la inteligencia, obediencia, concentración, sociabilidad y agilidad de los animales; además de exhibiciones que muestran las cualidades de los animales para ayudar en labores de asistencia, terapia, compañía...
Así pues, si mascotas, flores y jardines han acompañado al hombre desde sus orígenes más remotos, es casi un deber moral participar y disfrutar de un Salón donde se pueden encontrar algunos de los mejores ejemplares y creaciones.
Animo a todos los asturianos a que se acerquen hasta Avilés para pasear por Jardinequip y disfrutar de ésta aproximación a la naturaleza.
*Presidente del Principado