Estará compuesta por el Instituto de l’aragonés y el Institut aragonés del català y tendrá quince miembros
Zaragoza.- El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy los Estatutos de la Academia Aragonesa de la Lengua, la institución científica oficial en el ámbito de las lenguas y modalidades lingüísticas propias de Aragón que establece las normas sobre el uso correcto de estas lenguas y asesora a los poderes públicos e instituciones en esta materia.
La Academia estará compuesta por personas de reconocido prestigio en el ámbito de la filología, literatura y lingüística, preferentemente doctores, y con preferencia de nativos hablantes, que cuenten con una larga trayectoria en la práctica y el fomento de los valores lingüísticos y literarios propios de la comunidad aragonesa, y en la que estén representadas las lenguas y modalidades lingüísticas propias de Aragón. Para llevar a cabo sus funciones, la Academia contará con dos institutos, uno por cada una de las lenguas propias de Aragón: Instituto de l’aragonés e Institut aragonés del català. Sus competencias son: a) Investigar y proponer al Pleno de la Academia Aragonesa de la Lengua las normas gramaticales del aragonés o catalán de Aragón, teniendo en cuenta sus variedades lingüísticas. b) Inventariar y actualizar su léxico. c) Estimular el uso, enseñanza y difusión del aragonés o catalán de Aragón y de sus distintas modalidades. d) Defender y promover el aragonés o el catalán de Aragón y sus modalidades y velar por los derechos lingüísticos de sus hablantes. e) Colaborar en la formación del profesorado. f) Proponer el criterio de autoridad en las cuestiones relativas a la normativa, actualización y uso correcto de la lengua aragonesa o catalana en Aragón. g) Asesorar a los poderes públicos e instituciones sobre temas relacionados con el uso correcto del aragonés o catalán de Aragón, su promoción social, así como sobre la determinación oficial de los topónimos y los antropónimos. h) Las que, en el ámbito de su competencia, le encomiende el Gobierno de Aragón. El cargo de académico es honorífico y su elección corresponde, a partes iguales, a las Cortes de Aragón, el Gobierno de Aragón y la Universidad de Zaragoza.