El candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, subrayó hoy que en las elecciones del próximo 20 de noviembre los ciudadanos tienen que decidir entre “dos menús”: “educación y sanidad a la andaluza, a la vasca o a la asturiana”, o “recortes a la madrileña, o a la valenciana”.
Durante un encuentro en Mieres, Asturias, con alcaldes, concejales y cuadros socialistas de las comarcas mineras, Rubalcaba subrayó que en estos comicios “nos jugamos mucho”, porque hay quien plantea que “para salir de la crisis hay que recortar en sanidad y en educación”. “No lo dicen de cara,- apuntó-, pero en el fondo el mensaje que transmiten es ése: si queréis salir de la crisis tenéis que tener menos educación y menos sanidad”, dijo.
Rubalcaba afirmó que él defiende justamente lo contrario: “si queremos salir de la crisis tenemos que tener más y mejor educación pública, porque es la investigación, la educación, la innovación la que nos va a sacar” de esta situación y “recortar en educación es una forma de no salir nunca de la crisis”. El candidato socialista también se mostró partidario de mantener “una buena sanidad, que también crea empleo, innovación y que da seguridad a la gente”.
En este sentido, subrayó que “no podemos crear incertidumbre social sobre la incertidumbre económica. Eso nosotros no lo vamos a hacer”, sentenció.
“Yo no prometo un puesto de trabajo a cada español que no lo tiene para el día 21 -explicó Rubalcaba- pero sí le digo que, si no tiene empleo, va a tener desempleo, que tendrá escuelas para sus hijos, hospitales si se pone enfermo, y dependencia si tiene algún familiar que no puede valerse por si mismo”. Algo que, en su opinión, es “perfectamente compatible con una política económica austera que nos permita salir de la crisis, porque no es lo mismo recortar en educación que recortar en gastos suntuarios, o en gastos que no son productivos”. “Se puede ser austeros, pero respetando esos servicios básicos que generan riqueza, generan futuro, como es el caso de la educación, y generan seguridad en la gente, que en este momento tiene una gran inseguridad”, sentenció.
Como en otras comparecencias, Rubalcaba ha insistido en que las elecciones del 20N son “las más importantes” que España va a vivir desde el año 77 y que en ellas “nos jugamos muchas cosas”. Vamos a elegir un presidente para cuatro años y “conviene poner las luces largas”, por eso “si alguien cree o promete que un cambio de Gobierno solucionará en un día los problemas, está engañando” y “si alguien cree que se van a crear 3,5 millones de puestos de trabajo en un año, está mintiendo”, afirmó en referencia a las declaraciones de destacados dirigentes del PP.
El futuro es “educación, investigación, innovación, emprendedores, empresas y empleo”
El candidato socialista se ha mostrado convencido de que, aunque es verdad que lo estamos pasando mal y que quedan tiempos difíciles, “esto tiene arreglo”, porque “los fundamentos económicos de nuestro país son fuertes”. “España nunca tuvo tantas empresas tan importantes en el mundo, ni tanta capacidad de exportación, de investigación, ni unos jóvenes tan cualificados”, afirmó.
Precisamente, tras su visita a diversos centros y empresas tecnológicas asturianas, Rubalcaba ha destacado que Asturias “no sólo es una comunidad con raíces en sus estructuras económicas suficientes para salir adelante, sino que es la prueba de que España tiene los rudimentos para afrontar esta crisis” y superarla “haciendo cosas distintas y mejor, si queremos competir”.
De la empresa Rioglas ha destacado que esté compitiendo en el mundo en un campo tan complejo como el de las energías renovables, gracias a la tecnología punta que aplica, mientras que de la Universidad Politécnica de Mieres resaltó el hecho de que “está formando gente para salir de la crisis con potencia”.
“Ese es el futuro”, ha dicho Rubalcaba, “educación, investigación, innovación, emprendedores, empresas y empleo, y ese futuro lo he visto aquí esta mañana. He visto la base misma de lo que va a ser la nueva economía española y que en Asturias es ya una realidad”, dijo.
Asimismo, Rubalcaba remarcó la diferencia entre los empresarios asturianos con los que se había encontrado a lo largo de la mañana “comprometidos con su país, que creen en sus empresas, que arriesgan, innovan y crean empleo”, como la gran mayoría de nuestros empresarios, y aquellos otros que “llevan a sus empresas a la ruina y antes de dejarlas en manos de los fondos públicos se llevan una indemnización millonaria”. Con los primeros “tenemos que contar y hay que ayudarles” y “a los otros hay que prohibirles sus prácticas obscenas e inmorales”, concluyó.
Ayudar a crear empleo
Rubalcaba ha vuelto a defender su idea de que “no hay que esperar sentado” a que la economía cree empleo por sí sola, cuando crezca al 2%, sino que hay que ayudar y facilitar que las empresas creen empleo abaratando los costes salariales. “Nos vamos a gastar dinero público para incentivar la creación de empleo” pensando que “ese empleo generará productividad, consumo y, al final, tirará de la economía y de la creación de empleo”, ha dicho el candidato.
Un dinero que “hace falta pedírselo a alguien” y que él ha propuesto obtener mediante un impuesto “bien diseñado” para las grandes fortunas, que “nos dará recursos para generar empleo” e impedirá lo que pasa con el actual impuesto de patrimonio, del “que algunos se escapan a base de ingeniería”.
En definitiva, se trata de “ayudar a las empresas a crear empleo y de pedir un esfuerzo a quien tiene grandes fortunas, para crear empleo para jóvenes, aunque no sólo para ellos”. “Ese es el planteamiento. Ideas claras, programas claros y, sobre todo, cuentas claras”, concluyó Rubalcaba.