Para esta Semana Santa os proponemos una escapada donde la naturaleza es la principal protagonista. Una experiencia única que os permitirá descubrir dos de los valles más espectaculares de la geografía leonesay en las que podréis disfrutar de impresionantes paisajes, realizar rutas de senderismo, en bicicleta o en 4x4, navegar por el embalse de Riaño o descubrir al lobo ibérico en su habita natural. Los valles de Riaño y Reyero se encuentran en la Montaña Oriental Leonesa, a poco menos de dos horas de la capital y forman parte del Parque Regional Montaña de Riaño y Mampodre. Con una superficie superior a las 120.000 hectáreas, el parque regional constituye uno de los principales tesoros naturales de España. Territorio abrupto y con fuertes pendientes, se ve surcado por arroyos, tapizado de verdes pardos y cubierto por espesos bosques, donde el hayedo es el principal protagonista compartiendo espacio con acebos, tejos, robles y abedules, en definitiva, un paraíso en la tierra donde se ven representados todas las especies del bosque atlántico. Territorio que da cobijo a diferentes especies como el rebeco, el corzo, el lobo, sin olvidarnos de dos de las especies más emblemáticas de la Cordillera Cantábrica, el oso pardo y el urogallo. Y surcando los aires el buitre leonado, el águila real y cada vez con más frecuencia el quebrantahuesos.
VALLE DE RIAÑO La localidad de Riaño es la más joven de la provincia de León, pues el antiguo pueblo fue anegado por las aguas del pantano en el año 1987. En la actualidad Riaño es un núcleo urbano dotado de unas infraestructuras turísticas de primer orden y una arquitectura que ha sabido respetar las construcciones típicas en piedra labrada. Variadas y atractivas son las opciones que Riaño ofrece al visitante, una de ellas hace referencia a la historia de este valle y al recuerdo de los pueblos que tuvieron que ser abandonados por la construcción del embalse. Se trata del Paseo del Recuerdo, una senda peatonal que bordea la zona sur de pueblo y que ofrece unas vistas espectaculares del embalse con las majestuosas montañas al fondo. A lo largo de este agradable paseo hay colocados unos paneles informativos en los que se muestran imágenesy explicaciones de las vistas que desde esos puntos se podían disfrutar antes de la construcción de este “mar artificial”. Una experiencia que permite conocer y recordar lo que fue el antiguo Valle de Riaño. Antes de salir del pueblo haremos un alto en el que es conocido como el “banco más bonito de León”. Situado a los pies de la iglesia de Nuestra Señora del Rosario se encuentra este cómodo mirador que nos regala imágenes del embalse y de la isla de la “Encina la Cueva”, lugar donde se encontraba el antiguo Castillo de Riaño y desde donde admirar el cambio cromáticos de las diferentes estaciones. Después de este primer acercamiento al Valle de Riaño nos dirigimos al embarcadero del embalse para dar un agradable paseo en barco y descubrir los conocidos como “fiordos leoneses”. Un recorrido de una hora y media de duración que acerca al visitante al algunos de los rincones más bellos de la montaña leonesa como el Valle de Anciles, también llamado “Valle del Silencio” y a míticas montañas como el Llerenes o el Nebloso. Una experiencia que vamos a recordar durante mucho tiempo y que nos permitirá acceder a espacios a los que no se puede llegar de otra forma, como hayedos o el singular bosque de Hormas y sus robles centenarios. Información y reservas llamando al teléfono 987 740 665 y en las oficinas del Ayuntamiento. Definitivamente este valle ofrece ilimitadas posibilidades, que van desde las numerosas rutas de senderismo, en moto, y por supuesto en bicicleta, paseos a caballo y la práctica de deportes como la vela fluvial, sin olvidarnos de los atrevidos que se pueden decantar por el alpinismo o la espeleología. Este viaje al Valle de Riaño se puede completar visitando el Museo Etnográfico de la Montaña de Riaño y las iglesias de Nuestra Señora de Santa Águeda y Nuestra Señora del Rosario en Riaño y acercarnos a los vecinos pueblos de Carande y Horcadas. picas en piedra labrada. una arquitectura que ha sabido respetar las construcciones t olvidarnos de dos de las especies ms prad
EN BUSCA DEL LOBO IBÉRICO Os proponemos para estos días de vacaciones la que puede ser la experiencia más impactante de vuestras vidas, observar al lobo ibérico en su hábitat natural. A día de hoy, probablemente la Montaña Oriental Leonesa en general, y la Montaña de Riaño en particular sea el mejor lugar de Europa para observar lobos en libertad. Para poder realizar esta actividades necesario contar con la organización, las infraestructuras y el conocimiento del terreno de verdaderos profesionales. La mejor opción es contar con los servicios de la empresa Wid Watching Spain, que se encargarán de organizaros excursiones guiadas para poder admirar este bello animal, denostado por muchos pero tan importante para el equilibrio de la naturaleza, ofreciendo además el transporte en todoterreno, así como la disponibilidad de material óptico incluido. En el caso de llevarse a cabo en invierno, cuando el terreno esta cubierto de nieve, también pondrán a vuestra disposición raquetas y bastones. Para conocer las propuestas que esta empresa ofrece, precios o hacer reservas, podéis consultar la web: www.wildwatchingspain.com
VALLE DE REYERO El Valle de Reyero es otro bellísimo rincón de la montaña leonesa, donde la naturaleza manifiesta una biodiversidad increíble, compartiendo el espacio con seculares praderíasganaderas. Un lugar escondido y vivo, mágico, natural y puro, preñado de historias y leyendas, de mil caminos para empaparnos de su esencia y con rincones de una belleza casi extenuante. Así es el Valle de Reyero, un lugar que sin importar la estación del año en que se visite siempre es hermoso. Recorrer sus sendas y caminos nos llevarán a descubrir pequeños arroyos de aguas cristalinas y frondosos robledales y, por supuesto, sus pequeños pueblos de piedra. Paraíso para los amantes de la naturaleza, en sus cuatro cotos abunda los corzos, los rebecos y los venados, así como el jabalí, la perdiz y la codorniz, sin olvidarnos de cigüeñas, águilas, buitres… Antigua ruta de paso para los monjes vadinienses que descansaban a los pies de las hayas de “la humildad” en Primajas, este increíble valle ofrece numerosas posibilidades para realizar diferente rutas de senderismo o en bicicleta como la Ruta Cuatro Pueblos que une las localidades de Viego, Primajas, Corniero y Valbuena del Roblo; la Subida a la Collada de Lois que ofrece unas vistas espectaculares desde el Puerto de Valdehigüende y del recóndito Valle del Río Dueñas o la Collada de Linares que nos regala unas vistas impresionantes del vecino pueblo de Lois. La mejor opción para conocer este hermoso valle es contratar los servicios de Taxitur, empresa que organiza excursiones en4x4 y que nos mostrará cómodamente algunos de los rincones más bellos del Valle de Reyero.
CÓMO LLEGAR La manera más rápida de llegar a Riaño desde León es tomar la N-601 hasta Puente Villarente. En este punto nos incorporamos a la CL-624 que nos lleva a Boñar y aquí nos incorporamos a la CL-626. Continuamos por esta vía hasta encontrar la N-621 pasada la localidad de Sabero, carretera que nos llevará a nuestro destino. Para llegar a Reyero desde Riaño, seguiremos la N-625 hasta encontrar un desvío que nos lleva por la CL-635 a la localidad de Burón. Continuamos por esta carretera hasta el Puerto de Tarna donde nos incorporaremos a la LE-333 hasta Puebla de Lillo. En este punto debemos tomar la LE-331en dirección a Boñar bordeando el Embalse del Porma hasta encontrar un desvío que nos lleva primero a Pallide y después a Reyero. Si nos dirigimos a Reyero desde la capital tomaremos la N-601 hasta Puente Villarente. En este punto nos incorporamos a la CL-624 que nos lleva a Boñar, donde nos incorporamos a la LE-331 y a la altura del Embalse del Porma nos encontraremos una carretera a nuestra derecha que nos lleva a Pallide y a Reyero.