Desde junio del año pasado los seis miembros de la misión simulada a Marte Mars500 han permanecido aislados en una instalación especial cerca de Moscú. El próximo 4 de noviembre volverán a la Tierra y pasarán cuatro días en cuarentena para ser sometidos a pruebas médicas. Los periodistas podrán mantener un encuentro con la tripulación el próximo 8 de noviembre en Moscú.
 
Mars500 es la primera simulación de una misión tripulada a Marte que dura lo mismo que un viaje auténtico, en una infraestructura que replica fielmente casi todos los aspectos de la misión excepto la ausencia de gravedad; la radiación; y el vuelo interplanetario en sí mismo.

A lo largo de casi un año y medio una tripulación compuesta por dos europeos, tres rusos y un chino ha sobrevolado Marte, aterrizado en el planeta y llevado a cabo varias salidas en un terreno que simula la superficie marciana. Se han enfrentado a la monotonía, al retraso en las comunicaciones y a la ausencia total de luz diurna en su habitar sin ventanas.  
 

La tripulación está integrada por el ítalo-colombiano Diego Urbina y el francés Romain Charles, ambos seleccionados por la ESA; los rusos Sukhrob Kamolov, Alexei Sitev y Alexandr Smoleevski; y el chino Wang Yue.

Comportamiento humano auténtico

Antes de que la humanidad envíe a algunos de sus miembros más allá de la órbita baja terrestre –en un futuro no muy lejano-, debe hacer frente a numerosos desafíos y problemas técnicos.

Además del reto de desarrollar un vehículo apropiado, una de las mayores incógnitas es el propio comportamiento humano, y cómo se ve afectada la relación entre los miembros de la tripulación durante estancias prolongadas en espacios cerrados y en condiciones de estrés. Investigar esta cuestión ha sido el principal objetivo del experimento Mars 500.

La tripulación ha estado llevando a cabo docenas de experimentos, generando datos que ayudarán a los científicos, ingenieros y controladores a evaluar a qué deberán enfrentarse los viajeros del futuro.

Los tripulantes de Mars500 se han comportado como un equipo unido y estable. No se han producido conflictos importantes, y han completado el difícil viaje como lo hubiera hecho una tripulación real en un misión a Marte.

La ESA, la agencia rusa Roscosmos y el Instituto Ruso de Problemas Biomédicos (IBMP) han convocado una rueda de prensa con la tripulación y con científicos responsables del experimento.