ASTURIASDIARIO.-Un victorioso Real Oviedo visita al Huesca, que lleva 7 jornadas como líder, y 22 jornadas invicto en su terreno de juego, donde además solo ha encajado 4 goles y cedido 2 empates

Tras el espectacular sprint final, del pasado año, el Real Oviedo co­mienza el año a lo grande. Mañana rinde visita al líder, el Huesca; y el próximo fin de semana, los azules se enfrentarán al Rayo Vallecano, cuarto clasificado, en la segunda salida consecutiva, y en el primer partido de la segunda vuelta. Dos duros huesos, que pondrán a prue­ba la fortaleza del bloque que ha construido, Juan Antonio Anquela, y que han colocado al Real Oviedo, por primera vez en lo que va de Li­ga, en el grupete de cabeza (tercera posición) y a tan solo un punto del ascenso directo, y a 3 puntos de un Huesca que sigue haciendo historia en Segunda División.

El Oviedo cerró 2017, con ‘no­tazas’, y los últimos partidos con un sobresaliente. Cinco victorias consecutivas, y 7 victorias en los últimos 8 partidos, que equivalen a un total de 21 puntos de 24 posibles. Además, los azules son el segundo equipo más anotador (31 goles), empatados con el Huesca y el Gra­nada, y solo por detrás del Vallado­lid (38). Y como las alegrías nunca vienen solas, el Real Oviedo lleva 4 partidos consecutivos sin encajar ningún gol. Números de Primera, que han vuelto a encender la me­cha del optimismo en la grada y en una afición que ya cuenta los días que faltan para recibir en el Tartie­re, catorce años después, al Spor­ting de Gijón.

Hasta aquí, las ilusionantes cuentas de la lechera, ya que aún queda media Liga por delante y 66 puntos en juego. El Real Oviedo co­menzará 2018 en el peor escenario posible, y donde el año pasado el equipo de Hierro fue vapuleado (4-0). El Huesca de ‘Rubi’ comanda la clasificación desde hace 7 jornadas, y en el siempre difícil y gélido cam­po de El Alcoraz, solo ha cedido dos empates (Sevilla Atlético y Reus), y ha ganado 8 partidos, en los que ha marcado 19 goles y solo ha encaja­do 4. Los oscenses llevan una racha de 20 partidos invictos como locales que se prolonga desde la tempora­da pasada. Además, sus delanteros se crecen en el pequeño estadio azulgrana (5.500 espectadores). Sus últimas 4 citas han acabado en go­leadas: 3-0 contra Lugo y Tenerife; y 3-1 ante Córdoba y Zaragoza. El Huesca no tiene un ‘pichichi’, sino dos. El delantero colombiano Cu­cho Hernández, y el centrocampis­ta Gonzalo Melero (también actúa como mediapunta), llevan 10 goles cada uno. En total, suman 20 de los 31 goles que ha marcado el Hues­ca. Pero Melero, canterano del Real Madrid, no jugará contra el Oviedo, tras ver la quinta amarilla en el úl­timo partido del año. Los oscenses también son el segundo equipo que menos goles encaja (14 tantos), por detrás del Cádiz (12).

Un partido de altura, entre el primer y tercer clasificado, que pue­de apretar aún más la clasificación en el pelotón de cabeza, donde so­lo dos puntos separan al Cádiz -se­gundo- del Granada que es sexto, y cuatro al Lugo que ocupa la séptima posición. Juan Antonio Anquela, en busca de la sexta victoria consecuti­va, alineará mañana al mismo ‘once’ de los últimos encuentros: Alfonso; Forlín, Carlos Hernández, Chris­tian; Diegui, Mossa; Folch, Rocha; Saúl Berjón, Aarón Ñíguez y Lina­res. El técnico de Jaén no podrá vol­ver a contar con el ghanés Yeboah, mientras Toché y el argentino Fab­brini siguen acortando los tiempos de su recuperación.

La temporada pasada, Juan Antonio Anquela llevó al Huesca a las puertas del ascenso, y tras su marcha, el club inició un nuevo pro­yecto fichando al entrenador Joan Francesc Rubí (ex del Sporting), y reforzándose con jugadores como el portero del Levante Remiro o el goleador de la Cultural Álex Gallar (23 goles y 17 asistencias el año pa­sado). El Huesca, pase lo que pase mañana, seguirá una semana más como líder. Pero si el Real Oviedo sigue enchufado puede aguarle la fiesta, acabar con su racha de 20 partidos invicto en El Alcoraz, y co­locarse a solo un punto de los os­censes, en el ecuador de la competición.

Koné, el deseado

El Oviedo vuelve a mirar a Leganés. Del equipo pepi­nero, llegó al comenzar la temporada, Owusu Kwa­bena. Un joven y prometedor delantero de Ghana, que no ha cuajado en los pocos minutos que ha te­nido en el ‘once’ de Anquela. Todo lo contrario que su compatriota Yaw Yeboah, que llegó al conjunto azul para jugar en el Requexón, y que ahora no hay quién le mueva del banquillo y del césped del Carlos Tartie­re. Mamadou Koné (Costa de Marfil, 26 años) jugó una temporada en el Real Oviedo, a las órdenes de Sergio Egea, donde marcó 6 goles, aunque muy lejos de los 18 goles -y un ascen­so- y 7 tantos, que marcó en sus dos últimas tempo­radas en el Racing de Santander. Tras su fugaz paso por el Oviedo, ‘aterrizó’ en el Leganés donde solo ju­gó 5 partidos en la anterior temporada, y en la actual aún no ha debutado en Liga. Koné puede convertirse en un jugador de ida y vuelta, y es el ‘9’ deseado por Anquela para reforzar un ataque cojo de efectivos aunque, paradójicamente, el Oviedo sale a un gol y medio por partido, y solo el Valladolid le su­pera en número de goles.

La defensa, el mejor ataque

La ‘defensa inglesa’ le sienta como un guante al Real Oviedo. El antídoto aplicado por Juan Antonio Anquela a la debilidad de la zaga (13 goles en los primeros 10 partidos), ha propiciado que los azules sumen 21 de los últimos 24 puntos en juego, situándose a solo un punto del ascenso directo. El acierto del central Carlos Hernández en el área contraria (4 goles), la labor de Forlín en el eje de la zaga, el mejor rendimiento de Christian Fernández junto al argentino, y las galopadas por las bandas de Mossa y Diegui Johannesson, han convertido a los azules en un equipo sólido atrás y afilado delante. Tres centrales y dos laterales que corren como galgos, con poderío defensivo y también ofensivo. Una defensa de cinco, y con tres centrales, que el oviedismo ya recita de memoria, y que hace difícil el regreso de Héctor Verdés al ‘once’ de Anquela.

Carlos Hernández se ha destapado como uno de los goleadores del equipo. Sus testarazos ante el Barça B, Nástic, Numancia y Cultural, le convierten en el defensa más letal de la categoría. El ex central del Lugo es la referencia del Real Oviedo a balón parado. A sus 1,85 metros de altura, une su visión para el desmarque y el remate. Y además, es uno de los pilares de la defensa. El Real Oviedo solo ha perdido uno de los últimos 8 partidos (3-1, en Valladolid), el encuentro que Carlos Hernández se perdió por sanción. Pero el gallego no es el único defensa con gol. Guillermo Cotugno y Christian Fernández también se han estrenado esta temporada, y el islandés Diegui Johannesson sigue haciendo méritos para disputar el Mundial de Rusia con su selección, tras marcar 2 tantos.

Los goles de la defensa compensan uno de los principales problemas del Real Oviedo: la sequía de sus delanteros. Toché hizo 5 dianas en las primeras 7 jornadas, pero desde su último gol (2 de octubre) hasta su lesión (29 de octubre), estuvo 451 minutos sin ver portería. 5 partidos completos. En su ausencia, Miguel Linares se ha reivindicado como delantero (rinde más como ‘9’ puro que pegado a la banda), aunque lleva 3 partidos sin marcar tras haber hecho cuatro goles en los primeros cuatro partidos que disputó tras la lesión de Toche. A Saúl Berjón, empatado a goles con el delantero murciano, también se le ha mojado la pólvora, aunque mantiene intacto su fino punto de mira. Lleva sin marcar un gol siete jornadas (el último fue de penalti ante el Lugo), pero ya ha dado 6 asistencias que se han convertido en goles y en puntos, para un Oviedo que se ha desmelenado en la recta final de año. Aunque el equipo de Anquela, tiene gol en todas sus líneas (Rocha lleva dos y Aarón Niguez cuatro), los azules necesitan reforzar la delantera, con un fichaje, o subiendo a Steven del filial donde ya lleva 15 goles.