- Este tipo de test se ha revelado como una alternativa eficaz para llegar a las personas que valoran especialmente la accesibilidad, la rapidez, la confianza y el anonimato
- El 71% de los usuarios son varones, el 28,8% mujeres y un 0,2% transexuales, y la mayoría se enmarca en el grupo de 30 a 39 años
- La penetración vaginal sin preservativo es la principal práctica de riesgo entre los casos detectados
El proyecto piloto que se ha puesto en marcha en Asturias para realizar pruebas rápidas de detección del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) en oficinas de farmacia ha permitido llevar a cabo en un año 666 test, que en 11 casos dieron un resultado positivo, el 1,7% del total.
Esta prueba precisa confirmación de laboratorio para ser totalmente válida. No obstante, de los 11 positivos detectados inicialmente desde septiembre de 2016 al mismo mes de este año, sólo pudieron validarse siete en el hospital de referencia, ya que los cuatro restantes optaron por no acudir al centro para hacerse la analítica definitiva.
Estos siete casos confirmados suponen el 10,6% del total de los 66 nuevos diagnósticos de 2016, lo que demuestra la validez del pilotaje para facilitar que se hagan la prueba personas que valoran especialmente la accesibilidad, la rapidez, la confianza y el anonimato y que quizá no hubieran acudido a otros dispositivos sanitarios.
El 71% de los usuarios de este nuevo servicio, que complementa a las pruebas gratuitas que se llevan a cabo en los centros de orientación familiar y a los test que realiza el Comité Ciudadano AntiSida, fueron varones; el 28,8%, mujeres, y un 0,2% personas transexuales.
El grupo de edad que se sometió a un mayor número de pruebas fue el de 30 a 39 años, con el 34% del total. La edad media de los usuarios se sitúa en 37,7 años.
El 45,5% de las personas con un resultado positivo refiere prácticas de riesgo heterosexuales y el 54,5%, relaciones homosexuales y bisexuales sin protección.
Encuesta a los usuarios
A todas las personas que se hicieron la prueba en las farmacias se les realizó una encuesta voluntaria y anónima de la que se han obtenido algunos resultados sobre las prácticas de riesgo que han de ser tomados con cautela por las peculiaridades del muestreo. De esas conclusiones se desprende que la penetración vaginal sin preservativo es la principal práctica de riesgo (42,4%), seguida de la penetración anal sin condón (12,4%). La mayoría de los consultados asegura que nunca se había hecho antes la prueba, mientras que un 46,8% sostiene que sí.
El 42,6% de los usuarios eligió el test de farmacia por la rapidez del resultado, mientras que la accesibilidad geográfica y horaria fue la principal motivación para el 33,4%. También se valora la confianza que proporcionan las boticas y la confianza.
A la vista de los datos, se puede concluir que estas pruebas constituyen una alternativa válida para diversificar los lugares de realización, disminuir el diagnóstico tardío y favorecer el acceso a las personas que probablemente no hubieran acudido a los servicios sanitarios. Esta oferta, fuera de un ámbito directamente relacionado con el VIH, puede favorecer el acceso al test y su normalización.
Este aumento del número de pruebas en farmacias no ha afectado al volumen global de las que se realizan en las unidades de infecciones por transmisión sexual, que no se han visto mermadas.
Por otro lado, el Comité Ciudadano AntiSida también puso en marcha un proyecto piloto para practicar pruebas rápidas orales tanto en su sede como en distintos puntos de Asturias, con el fin de acercarla a la población, normalizarla y darle visibilidad. Así, en un año se realizaron 284 test, la mayoría a personas de 30 a 34 años. El 58% fueron varones, el 39% mujeres y el 3% transexuales.
El director general de Salud Pública, Antonio Molejón, ha presentado la evaluación de este proyecto con motivo del Día Mundial de Lucha contra el Sida, que se celebra hoy, y con el que se pretende reforzar la respuesta frente a la epidemia con el lema #transmiterespeto, centrada en el derecho a la salud de las personas con VIH. Molejón ha estado acompañado por la presidenta del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Asturias, Belén Fernández; la presidenta del Comité Ciudadano AntiSida, María Dolores Fernández, y la coordinadora de Xega, y Josune Álvarez.