El consejero de Sanidad anuncia que estará operativa en diciembre. Los pacientes podrán obtener los medicamentos prescritos por su médico en cualquier farmacia del territorio en el que se encuentren
El Principado de Asturias se incorpora desde diciembre a la receta electrónica que permite la dispensación de fármacos entre comunidades autónomas. El consejero de Sanidad, Francisco del Busto, ha explicado que este importante avance permitirá a los usuarios del sistema sanitario asturiano recoger su medicación en las farmacias de otras regiones que también lo hayan implantado.
La movilidad de los ciudadanos a lo largo del territorio nacional hace necesario el desarrollo de un sistema de receta electrónica que asegure la prestación farmacéutica en el Sistema Nacional de Salud (SNS), independientemente de la comunidad en la que se encuentre el usuario. De esa forma, cualquier persona desplazada fuera del Principado y que precise de algún tratamiento prescrito en su centro de salud mediante receta electrónica, podrá recogerlo en cualquier farmacia del territorio en que se encuentre, siempre que cuente también con este servicio.
Las comunidades certificadas en interoperabilidad actualmente son Aragón, Canarias, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura, Galicia, La Rioja, Navarra y la Comunidad Valenciana.
La consejería ha realizado a lo largo de este año, y en colaboración con el Colegio Oficial de Farmacéuticos, diversas adaptaciones tecnológicas para responder a las exigencias establecidas por el Ministerio de Sanidad en la implantación de esta aplicación. También ha llevado a cabo las pruebas oportunas con el resto de comunidades autónomas, tanto de prescripción como de dispensación, para garantizar su perfecto funcionamiento.
Del Busto ha destacado la complejidad de este trabajo, ya que ha sido necesario aunar sistemas diferentes, buscando convergencias que permiten numerosas ventajas, tanto para farmacéuticos como para facultativos y pacientes, y que se está llevando a cabo de forma progresiva. “Su implantación dará un servicio de más calidad al usuario, que podrá desplazarse a las comunidades autónomas participantes sin necesidad de llevar los fármacos recetados para periodos largos ni acudir a otros centros sanitarios para la emisión de recetas”, ha explicado.
El proceso de dispensación mediante este sistema es el habitual y se inicia cuando el paciente acude a una oficina de farmacia a retirar medicamentos prescritos en una comunidad autónoma diferente. Para poder realizar la interoperabilidad, es necesario que exista una conexión entre ambas regiones y que el usuario presente la receta electrónica activa y su tarjeta sanitaria.
Beneficios de la receta electrónica
La extensión de la receta electrónica es una ventaja para los ciudadanos, especialmente los enfermos crónicos, ya que no tienen que acudir repetidamente al centro de salud para obtener su medicación. Además, ha permitido realizar consultas de mayor calidad y más centradas en las necesidades de salud de los pacientes al eliminarse la carga burocrática de la atención primaria, de forma que el tiempo empleado en trámites como la emisión de recetas para la continuidad de tratamientos puede dedicarse a la actividad clínica. En octubre se dispensaron 1.853.196 prescripciones, de las que el 73,8% fueron mediante la receta electrónica.
Este sistema se puso en marcha en Asturias en abril de 2013 y finalizó su extensión en noviembre de 2014. Actualmente funciona en todos los centros de salud, consultorios y oficinas de farmacia del Principado y alcanza a todos los usuarios. En 2016 se incorporaron los productos farmacéuticos sometidos a visado y en la actualidad se trabaja para llevar a los hospitales a la receta electrónica, que será una realidad el próximo año.