El muestreo se centrará en Monteana, El Lauredal, San Juan de Nieva y la depuradora de Maqua y ha sido adjudicado por 122.016 euros. La empresa encargada, Envira Ingenieros y Asesores S. L., realizará mediciones con una frecuencia mínima de tres veces por semana, tanto en días laborables como en fin de semana. El trabajo forma parte de la revisión de los planes de mejora de la calidad del aire y busca profundizar en las características y el origen de las conocidas como PM10
Asturias.-El Gobierno de Asturias ha concluido los trámites para la adjudicación del estudio que durante cuatro meses analizará las partículas de contaminación atmosférica en Gijón y Avilés. El Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA) ha publicado esta semana la formalización del contrato, el último paso antes del trabajo de campo, que ha sido adjudicado a la empresa Envira Ingenieros y Asesores S. L. por un importe total de 122.016,40 euros.
Las mediciones de las partículas en suspensión, las conocidas como PM10, se centrarán en las zonas de Monteana y El Lauredal, en el oeste de Gijón, y en San Juan de Nieva y la depuradora de Maqua, en Avilés. Se han elegido estas áreas por la probabilidad histórica de que allí se produzcan picos en los niveles de contaminación durante el periodo de examen.
El muestreo tiene como objetivo, además de determinar los niveles de PM10, establecer la composición química y el origen de las partículas. Para ello, se realizarán análisis en diferentes condiciones climáticas, que permitan establecer conclusiones válidas. Asimismo, se cuantificará el grado de contribución de las distintas fuentes emisoras a la contaminación observada.
Para obtener los datos se utilizarán captadores gravimétricos de alto volumen con resolución diaria. En el muestreo se emplearán tres filtros, como mínimo, durante cada una de las 16 semanas que durará el análisis hasta acumular al menos 48 filtros para cada uno de los cuatro captadores. Los días en que se tomarán referencias variarán entre días laborables y fines de semana.
Además, para completar el estudio se recogerán y analizarán catorce muestras del material que emiten las fuentes contaminantes localizadas en cada área. Esto permitirá establecer con mayor fiabilidad el grado de generación de partículas PM10.
Una vez registrada toda la información, la empresa adjudicataria cuenta con dos meses más para realizar los cálculos e interpretar los datos.
El estudio forma parte de la revisión de los planes de mejora de la calidad del aire para reducir la concentración de partículas en suspensión menores de diez micras (PM10) en Gijón y Avilés aprobada por el Consejo de Gobierno el pasado agosto y que estará vigente hasta 2019. Está en marcha, además, un proyecto de acción a corto plazo para rebajar los niveles de benceno en la localidad ovetense de Trubia. Las tres iniciativas movilizarán una inversión global de 25,4 millones.