-   El consejero de Educación demanda ante la Comisión General de las Comunidades Autónomas del Senado mayor respaldo a la escuela pública como garante de inclusión y equidad social

-   Propone centrar el currículo en indicadores y competencias básicas e incorporar una asignatura sobre valores éticos obligatoria en todas las etapas

El consejero de Educación y Cultura, Genaro Alonso, ha abogado hoy por impulsar un pacto social, político y territorial que ayude a reforzar la calidad del sistema educativo y permita unificar la formación del profesorado mediante un cambio de la actual fórmula de acceso a la actividad docente.

En este sentido, ha propuesto la implantación de una prueba selectiva previa para el acceso a la función pública seguida de una formación práctica y remunerada en los centros educativos, de modo que el procedimiento estaría abierto hasta el final de las prácticas de los docentes.

Además, ha defendido un marco común de competencias profesionales para mejorar la formación permanente y la configuración de un cuerpo único de profesorado para el acceso a la evaluación docente, la denominada carrera profesional.

El titular de Educación, que ha comparecido ante la ponencia de la Comisión General de las Comunidades Autónomas del Senado que analiza la puesta en marcha de un pacto educativo, ha reclamado también un mayor respaldo a la escuela pública como eje vertebrador de un sistema basado en la calidad, la equidad y la inclusión, que sitúa al alumno como centro de todas las decisiones.

Por otra parte, en el ámbito lectivo, ha reivindicado la reducción del número de materias que incluye el currículum de la enseñanza básica, especialmente en Primaria, y la incorporación de una asignatura de valores éticos obligatoria en todas las etapas.

 A su juicio, el currículo actual incorpora contenidos en exceso y se centra más en los temarios que en indicadores de evaluación, logros y competencias. En este contexto, el Principado defiende otro modelo basado en indicadores, estándares o competencias básicas.

El consejero ha incidido, asimismo, en la necesidad de dotar a los centros de una mayor autonomía, ligada al rendimiento de cuentas, y de recuperar las competencias del Consejo Escolar para lograr la participación efectiva de toda la comunidad educativa.

Cooperación territorial

La creación de una carta de servicios educativos mínimos y comunes en todos los territorios ha sido otra de las propuestas de Alonso, una iniciativa que garantizaría que los usuarios del sistema tengan los mismos derechos con independencia del lugar en el que residan. Además, ha reivindicado un marco común de referencia para la evaluación externa e interna de los centros, con un sistema estatal de indicadores consensuado. En este punto, ha solicitado redefinir el papel de la alta inspección como garante de las competencias estatales.

Por último, en relación con las enseñanzas universitarias, ha abogado por un acuerdo interterritorial que incluya la coordinación con las etapas preuniversitarias, la creación de nuevos modelos de financiación, el desarrollo de una carrera docente e investigadora, la promoción de la investigación y la innovación y el rendimiento de cuentas respecto al logro de objetivos.