El río Aller, que da nombre al Concejo, transcurre serpenteante entre el Puerto de San Isidro donde toma vida y se une al Caudal para ir pegados hasta el mar, lugar donde mueren todos los ríos. No me imagino el Aller, desaparecer del todo, con los ojos del alma que son los mas puros. Lo veo partir del cantábrico y alcanzar lentamente el Atlántico para como un pequeño velero surcar todos los confines de la tierra. Que seas muy feliz mar a dentro.

 

Pero, Aller, es mas que un río. Son sus valles, sus pueblos y sus gentes. De la naturaleza mas que hablar/escribir es mejor que uno lo vea in situ ya que es imposible buscar adjetivos para calificarla. Rutas/sendas que le dan al visitante un deleite sin par, por poder contemplar tan singular belleza. La población se reparte entre las 18 parroquias que configuran el municipio y se asientan entre 176 pueblos.

Las gentes, el mayor patrimonio. Se adaptaron al entorno natural. De las entrañas extrajeron el "carbón" que dio riqueza, prosperidad y bienestar. De los montes, pastos para el ganado y de la tierra propia, cosechas para poderse alimentar. Hoy, explotamos el turismo, con la estación invernal de Fuentes de Invierno a la cabeza. Los Hoteles rurales, restaurantes y bares con encanto, serán los impulsores de la nueva economía.

Los alleranos somo nobles, sin fisuras y leales. Saldremos adelante, con tesón, brega e ilusión. También, tenemos tradición y cultura. Vestigios de pasados tiempos, como la Torre de Soto, cuna de la reina de Asturias, Doña Urraca. Y como no, fiestas tradicionales/populares. La mas renombrada la de San Martín que cada 11 de noviembre reune en Moreda de Aller a miles de forasteros. El Toreo del santu, en Piñeres y la patrona de Alller, La Virgen de Miravalles que se festeja en Soto.

La gastronomía es otro baluarte a tener en cuenta, con platos de caza y  truchas de la zona. Así, como los tradicionales asturianos: pote, fabada y del "gochu" todo. Pero, hay un postre típicamente allerano : el panchón.

A los que nunca han estado en el Concejo de Aller, tienen una asignatura pendiente que es el de visitarla. Les aseguro que repiten. Y a los "mios" que viven dentro de sus limites, a los que por sus quehaceres están repartidos por otras latitudes, a todos nos une cosa, nuestro : Amor por Aller.

Dedicatoria :

Este articulo, es para todos los alleranos por igual. Pero, especialmente para los que están fuera, sobran las razones.

Agradecimiento, personal para Camilo Alonso, por las fotos que acompañan a este articulo.