CARTA ABIERTA A LA OPINIÓN PÚBLICA
Resulta especialmente doloroso para la Federación Española de la Orden Masónica Mixta Internacional Le Droit Humain - El Derecho Humano, abundar en el comunicado emitido los días previos al 1 de octubre en que hacíamos un llamamiento a los actuales responsables políticos a que abrieran las vías de comunicación, siempre imprescindibles que posibiliten que nuestra convivencia camine hacia los eternos ideales de Libertad, Igualdad y Fraternidad.
Por el contrario constatamos que lejos de detener la sinrazón ha sido la violencia la que se ha sembrado en las calles. Esta sementera augura una cosecha de intolerancia en donde difícilmente crece el razonamiento y la convivencia fraternal.
Creemos que la escalada en el enfrentamiento actual enmascara la voluntad mayoritaria de un pueblo por vivir y convivir en paz y que es especialmente grave que esa actitud sea auspiciada por quienes deberían garantizar la seguridad y el ejercicio de las libertades ciudadanas.
Volvemos a incidir en nuestra obligación de recordar a todos los representantes políticos de nuestro país que solo el dialogo y la tolerancia pueden superar la sinrazón a la que nos ha conducido su ausencia.
Por ello, queremos hacer llegar a la opinión pública Española e Internacional, nuestra mayor repulsa a los graves acontecimientos ocurridos el pasado día uno de octubre en multitud de poblaciones de la Comunidad de Cataluña, en la que la utilización desproporcionada de la Fuerza Pública, impidió una manifestación de diferentes opiniones por parte de la población.
Queremos confiar en los hombres y mujeres de corazón limpio que buscan entre sus semejantes la compañía para la construcción de una sociedad en Libertad, Igualdad y Fraternidad.
Desde la serenidad, pero también con la firmeza que el sentido común y el respeto que nuestro pueblo se merece, por su larga trayectoria de lucha por los DERECHOS HUMANOS, requerimos a los diferentes Dirigentes Políticos de nuestro País, para que sin mayor demora ni ejercicio de la violencia, se formulen negociaciones y dialogo que puedan restituir la convivencia violentada.
