El director de la regata Transgascogne transmite a la alcaldesa en el acto de recepción oficial la satisfacción de los regatistas participantes
Juan Ribas y Marta Güemes, los mejores españoles
Avilés.-El primero en llegar fue el 'Griffon', tripulado en solitario por el francés Ian Lipinski, que cubrió en algo menos de 46 horas las 240 millas náuticas que separan el puerto de salida, la localidad francesa de Les Sables d'Olonne, al sur de Nantes, de la línea de meta, a la entrada de la ría. La cruzó a las 10.07 horas de ayer con tres horas y veintidós minutos de ventaja sobre el segundo clasificado, el 'April Marine', uno de los dieciséis barcos de los 53 en competición con dos tripulantes a bordo, los franceses Clement Machetel y Jay Thomson. El tercero también fue un navegante en solitario, el suizo Simon Koste, a la caña de 'Eigth Cube Mojo'.
«Ha sido una regata muy agradable», manifestó Lipinski poco después de echar el pie a tierra. La clave de su clara victoria fue, según explicó, que mantuvo más tiempo que nadie el rumbo sur en su brújula. «El resto viró antes hacia el Oeste», una trayectoria más corta en la que a la postre encontraron menos viento. Tampoco sopló con demasiada fuerza. «Más bien flojo. Al principio había mucha ola, pero después el mar fue calmándose». Durante las 46 horas de travesía durmió «cinco veces media hora» y alcanzó una velocidad máxima de doce nudos.
Las últimas millas fueron las más difíciles. «Desde qué vi la meta hasta que la crucé pasó más de una hora», concluyó Lipinski, ganador de la Transgascogne 6.50 en el año 2015. Para conocer el de la presente edición todavía queda la segunda manga, la misma travesía pero a la inversa, Avilés-Les Sables d'Olonne. La salida está programada para el sábado.
Cuatro son españoles, dos en barcos dobles y otros tantos de un tripulante, Juan Ribas y Marta Güemes. Ocuparon respectivamente los puestos diecisiete y veinte en la clase serie solo a más de seis horas del ganador, Lipinski, a la caña del 'Griffon'.
Marc Chopin, presidente de la organización y del club de vela de Les Sables, se declaró «muy contento por la gran acogida que nos ha brindado la gente de Avilés» y agradeció especialmente «el gran trabajo de la gente de la marina que nos ha ayudado mucho. En dos años esperamos estar aquí», dijo en respuesta a las palabras de la alcaldesa. La recepción se celebró en el salón municipal, y además de un buen número de regatistas, jueces y personal de la organización, también estuvieron presentes el director de carrera, Denis Huges y el presidente del club Marina de Avilés La Peñona, Mario Bada, así como concejales de grupos municipales de la oposición.
La salida será el sabado en la bahía de Salinas. Los barcos participantes, denominados Minis 6.50, completarán un campo de regatas antes de iniciar al travesía a Les Sables, 240 millas náuticas en línea recta, que no será necesariamente la que sigan los regatistas. El rumbo se establece en función del viento, y las predicciones anuncian que soplará en contra, de componente Norte.