15.297 toneladas de aceites industriales usados se recogieron en el Principado de Asturias durante 2016.
SIGAUS, el Sistema encargado de gestionar el aceite industrial usado en España, puso en marcha a través de su red de gestión 3.849 operaciones de recogida para la recuperación de este residuo peligroso generado en 62 municipios asturianos, en los que se atendió a 1.443 establecimientos productores.
Más de la mitad fueron talleres mecánicos, si bien el sector que más residuo de este tipo generó fue la industria, con un 86% del total. Cumpliendo con los objetivos ecológicos legales, el 100% del residuo recuperado fue valorizado y destinado a los distintos procesos de tratamiento para su total aprovechamiento como materia prima, evitando con ello su impacto nocivo sobre el medio ambiente.
En Asturias se consumieron el pasado año 13.901 toneladas de lubricantes nuevos, un 5,7% más que en 2015. Esta cantidad representa el 4,7% del total de lubricantes comercializados en España por las empresas fabricantes adheridas a SIGAUS. Además de ser un producto que se utiliza principalmente en los sectores de la automoción y la industria, los aceites industriales tienen presencia en otras actividades empresariales muy heterogéneas, como el transporte, la construcción, la agricultura, o cualquier actividad en la que se requiera el uso de compresores, turbinas o engranajes, y donde el uso de aceites lubricantes se utiliza para refrigerar, aislar o disminuir la fricción entre las piezas de las maquinarias.
Esta versatilidad hace que el residuo resultante del aceite tras su vida útil se genere de manera muy fragmentada y dispersa, tanto desde el punto de vista de los establecimientos productores como del territorio, lo que implica una recogida de gran complejidad logística. A ello se suma que el aceite industrial usado es un residuo altamente contaminante debido a la presencia de hidrocarburos, metales pesados y otras sustancias tóxicas en su composición, por lo que es precisa su correcta gestión para evitar sus efectos nocivos sobre la salud y el medio ambiente.
Operaciones de recogida, claves para la protección ambiental
En 2016, a través de la red de gestores que realizan operaciones de gestión de aceites usados en el marco del Sistema, se efectuaron 3.849 recogidas en 62 municipios asturianos, en los que se atendió a 1.443 establecimientos productores. En ellos se recogió una cantidad bruta de 15.297 toneladas de residuo, un volumen que, en el caso asturiano, contiene un elevado porcentaje de impropios (agua, lodos o partículas metálicas) y que en los centros de transferencia es analizado y sometido a un pre-tratamiento para eliminar las sustancias contaminantes y facilitar su gestión final.
En términos territoriales, destacaron especialmente las operaciones de recogida en el medio rural, donde SIGAUS prestó un servicio de gran capilaridad. Del total de municipios donde se recuperó aceite usado, el 73% fueron rurales. En ellos se efectuaron 573 recogidas a lo largo del año, con la recuperación de 475 toneladas de residuo. En estas zonas rurales la recuperación del aceite usado tiene un importante valor añadido: además de los altos índices de fragmentación y dispersión del residuo, que exigen una operativa de recogida más compleja y costosa, es especialmente crucial por el riesgo ambiental que se evita, ya que la mayoría de espacios protegidos se encuentran en este medio.
Actividades productoras de residuo
La industria asturiana, en especial debido a la importante presencia del sector metalúrgico, es la principal actividad generadora de aceite usado: un 86% del volumen total recogido. También desde el punto de vista del consumo de lubricantes, los destinados a aplicaciones industriales acapararon el 73% de las ventas de estos productos en Asturias durante el pasado año.
A pesar de ello, en cuanto a establecimientos productores, el sector de la reparación del automóvil es claramente mayoritario en el Principado, con 813 talleres que generaron el 9% de los aceites usados recogidos en 2016 (1.353 toneladas) y que representan más de la mitad de los puntos de recogida atendidos por SIGAUS.
Además de en estos dos principales sectores generadores, SIGAUS atendió la recogida de 724 toneladas de aceite usado en actividades tan diversas como el transporte, hostelería, agricultura, construcción o comercio, entre otras. En suma, 415 puntos productores de muy diversa índole que de forma agregada representan el 29% del total de productores.
Un residuo peligroso con importantes recursos materiales y energéticos
Si bien es cierto que se trata de un residuo de naturaleza contaminante, el aceite industrial usado conserva gran parte de los hidrocarburos del lubricante original, lo que permite un alto aprovechamiento de los mismos. Tanto el proceso de regeneración del aceite usado, con el que se obtiene una base lubricante apta para la fabricación de nuevos lubricantes, como la valorización energética, que aprovecha el poder calorífico del residuo (tras una previa descontaminación), son tratamientos que permiten valorizar el aceite usado recuperado convirtiéndolo en una fuente importante de materias primas para la fabricación de nuevos productos o la obtención de energía, evitando con ello recurrir al refino del petróleo para producir aceites lubricantes y fuel óleo, respectivamente.
El aceite usado recogido durante el pasado año en Asturias fue valorizado en su totalidad, cumpliendo así con el objetivo ecológico establecido por la normativa ambiental. Una vez descontada la significativa cantidad de impropios detectados en el residuo, la cantidad neta finalmente gestionada y valorizada por parte de SIGAUS fue de 5.542 toneladas.
En el caso concreto de la industria metalúrgica, una gran parte del aceite usado fue sometido a un proceso de reciclado material, que permite su reacondicionamiento para su utilización en aplicaciones dentro de la propia factoría. Este tratamiento se dio a 2.936 t (que suman más de la mitad de todo el aceite usado gestionado de Asturias).
Un 13% del total neto recogido se destinó a regeneración, permitiendo devolver al mercado 473 toneladas de lubricantes. Además, este tratamiento hizo posible evitar la emisión a la atmósfera de 2.132 toneladas de CO2.
Por último, los aceites usados que no son aptos para ser regenerados, generalmente aceites que contienen una alta cantidad de otras sustancias (agua y metales) que dificultan su regeneración, se tratan para su posterior valorización energética. El producto resultante, un combustible de uso industrial de características similares al fuel óleo, se utiliza frecuentemente en industrias con hornos que deben suministrar una gran cantidad de energía, como los que suele haber en papeleras, cementeras y otras industrias de materiales de construcción (cerámicas, yeso, áridos) o en centrales térmicas de cogeneración eléctrica. Durante el pasado año, las 1.895 toneladas destinadas a valorización energética permitieron la generación de una energía equivalente a 20,55 GWh, suficientes como para abastecer el consumo de anual de 4.804 hogares asturianos.
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10 años de gestión Desde el inicio de su actividad, en 2007, SIGAUS ha cumplido con los objetivos ecológicos que la normativa actual (RD 679/2006) exige en cuanto a recogida y tratamiento de aceites usados para prevenir su incidencia ambiental. Todo ello gracias a la articulación de un servicio de recogida de gran capilaridad en el territorio, y un Sistema de Información Tecnológico que permite la trazabilidad del residuo desde que es recogido hasta que se convierte en un nuevo producto en las instalaciones de gestión final. A continuación se presentan algunos de los principales logros del Sistema, conseguidos durante una década dedicada a la gestión del aceite usado en España: · Más de 1,4 millones de toneladas de aceites usados recogidos y tratados. · Valorizado el 100% de los aceites usados recuperados. · Más de 950.000 toneladas destinadas a procesos de regeneración para la fabricación de nuevas bases lubricantes. · Más de 119.000 productores distintos atendidos en toda la geografía española. · Más de 2,8 millones de toneladas de CO2 evitadas gracias al tratamiento del residuo mediante su regeneración. · 3.552 acciones de prevención ejecutadas por sus empresas fabricantes adheridas para reducir el impacto sobre el medio ambiente de los lubricantes puestos en el mercado. · 6.000 árboles plantados en los Bosques SIGAUS, con el fin de contribuir en la creación de entornos más verdes y combatir el cambio climático. |