El cuidado del cuerpo es una de las mayores preocupaciones a nivel de salud de los españoles, sobre todo durante los meses donde las temperaturas alcanzan sus índices más extremos (durante los meses de más frío o de más calor). Si bien contar con productos de cuidado dermatológico, como los de Filorga u otras conocidas marcas de calidad, es importante tener en cuenta una serie de consejos a la hora de proteger nuestra piel, puesto que es una de las partes del cuerpo más delicadas y que se puede resentir de forma más negativa con la edad si no se cuida adecuadamente.
Proteger la piel del sol durante el verano
Salir sin protección durante los meses donde el sol pega más fuerte es de las peores cosas que podemos hacer para nuestra piel. Es muy importante que apliquemos protector solar adecuado para nuestro tipo de piel, de forma regular. Aparte de eso es importante evitar tomar el sol durante las horas de más calor del día, ya que incluso con protector solar nuestra piel puede dañarse.
Usar jabones suaves para la piel
Utilizar el jabón adecuado para nuestra piel puede ser la diferencia entre tener una piel bonita y sana o tener la piel demasiado seca e irritable. Siempre hay que intentar utilizar jabones que sean suaves o productos no demasiado fuertes con la misma, como por ejemplo los jabones ricos en lípidos.
Ducharse en vez de bañarse
Para cuidar la piel es mucho mejor darse una ducha que tomar un baño, puesto que este último crea un efecto adverso de deshidratación en la piel. También es importante no permanecer demasiado tiempo debajo del agua, y esta debería ser templada, no caliente, para evitar posibles leves quemaduras.
Abrigarse en caso de frío
El frío afecta negativamente a la piel, volviéndola mucho más sensible y secándola, generando así una sensación de picor prolongada. La forma más efectiva de combatir este efecto es mantener el calor, de modo que en caso de salir es aconsejable abrigarse bien.