Asturias es la segunda comunidad con mayor tasa de cobertura de rentas mínimas. El 60,8% de los titulares son mujeres y en los hogares perceptores se atiende a 10.070 menores. El 40% de los beneficiarios reciben esta ayuda como complemento a otras rentas
Asturias.-La consejera de Servicios y Derechos Sociales, Pilar Varela, ha asegurado hoy que el salario social básico, diseñado inicialmente para atender a unas 7.000 familias en riesgo de exclusión, sirve de apoyo económico, una década después, para mantener pequeñas rentas en más de 20.000 hogares afectados “por una crisis sin precedentes”. “Esta prestación se ha comportado como un colchón, como el último recurso de ingresos para más de 45.000 personas”, ha destacado Varela durante la presentación de los estudios encargados por el Gobierno de Asturias sobre la evolución de esta renta mínima.
Según esos informes, las cuantías de esta prestación han aumentado a medida que descendían los servicios de protección provenientes del Estado, como el seguro de desempleo o la renta activa de inserción. Asimismo, Asturias es ya la segunda comunidad autónoma con mayor cobertura de titulares, solo por detrás del País Vasco, y el salario social ha sido el recurso que menos cambios normativos ha requerido en este tiempo gracias a su avanzado diseño.
La media de esta renta básica se sitúa en el Principado en 442 euros, ligeramente superior a los 430 de la nacional. Además, el 40% de los perceptores la reciben como complemento a otras rentas.
Respecto a los perfiles, los estudios revelan que el 60% de los titulares son mujeres con menores a cargo; en concreto, en los hogares que lo perciben viven 10.070 niños. Asimismo, solo el 11,5% de los beneficiarios son extranjeros y la media de edad ha bajado hasta situarse en los 45 años, en el caso de los hombres, y en los 46, en el de las mujeres.
Por otra parte, un 87% de las personas que reciben esta renta mínima han participado, por término medio, en 3,5 medidas relacionadas con las políticas activas de empleo, principalmente relacionadas con la información y orientación, si bien las iniciativas formativas son mucho más escasas.
En cuanto a la incidencia del salario social en la dinamización de la comunidad autónoma, los estudios reflejan que de los 101 millones que se destinaron a esta prestación en 2015, el 92% volvió a repercutir en la economía asturiana.
Varias presentaciones
Las conclusiones de los informes también se han presentado hoy a los miembros de la mesa de Innovación y sostenibilidad social del Acuerdo para la Competitividad Económica y Sostenibilidad, y mañana se expondrán en una jornada monográfica en la que participarán unos 300 profesionales de los sistemas de protección social y de empleo, así como representantes de las entidades del tercer sector y de otras instituciones.
“Queremos explicar a la sociedad para qué ha servido su esfuerzo en estos diez años y devolverles lo que es suyo, porque suyo es el recurso y el presupuesto que destinamos a esta prestación”, ha precisado la consejera, que también ha expresado su compromiso con el mantenimiento del salario social y se ha mostrado abierta a impulsar nuevas formas de trabajar en colaboración con todos los sectores implicados.