El Diario Oficial de la Unión Europea publica hoy el anuncio del certamen, al que se podrá concurrir hasta el 12 de mayo

Los interesados tendrán tres meses para elaborar sus propuestas a partir de la publicación de la lista de admitidos

Asturias.-La Consejería de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente ha abierto el plazo de inscripción del concurso internacional de ideas que seleccionará la mejor propuesta para ordenar el ámbito urbano y los espacios que quedaron libres tras el traslado del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) de El Cristo a la Cadellada, en Oviedo. El anuncio se ha publicado hoy en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) y mañana saldrá en el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA).

Los interesados podrán concurrir al certamen hasta el próximo 12 de mayo. Una vez publicada la lista de admitidos, los concursantes tendrán tres meses para elaborar las propuestas. El proyecto ganador será elegido por un jurado formado por representantes de la Administración del Estado, el Principado, el Ayuntamiento de Oviedo, las asociaciones vecinales y los colegios oficiales de arquitectos y de ingenieros de caminos, canales y puertos, además de un arquitecto de prestigio y experiencia acreditada en la materia.

El concurso establece tres premios, dotados con  25.000, 9.000 y 3.000 euros, el primero de los cuales lleva aparejado el encargo de los proyectos urbanísticos y ambientales necesarios: el documento de revisión parcial del plan general de ordenación de Oviedo y la redacción del plan especial que desarrolle dicha revisión.

Podrá presentarse al concurso, como director, cualquier persona con titulación de arquitecto o ingeniero de caminos, canales y puertos, legalmente habilitada para ejercer la profesión en España. Tanto en el formato de persona física como jurídica se requerirá un equipo multidisciplinar mínimo formado, al menos, por un arquitecto, un ingeniero de caminos, canales y puertos, un abogado, un economista y un geógrafo.

Los pliegos y bases establecen pocos condicionantes y limitaciones para facilitar la libre expresión y concurrencia de planteamientos arquitectónicos y urbanísticos originales, así como de soluciones acordes con este tipo de intervenciones, que garanticen, además, el uso más eficiente posible de los recursos.

En los criterios de valoración fijados en las bases se han tenido en cuenta las líneas maestras del resultado del proceso de participación ciudadana: la movilidad, los espacios libres, el patrimonio y la diversidad de usos, así como la calidad global, la adecuación de la propuesta al entorno urbano y a las exigencias del programa funcional y de posibles usos, la calidad urbanística y arquitectónica, la viabilidad y solvencia técnica, económica y constructiva de la propuesta en los apartados de urbanización y edificación, y los parámetros de sostenibilidad social, económica y ambiental.