El Centro Niemeyer presenta su programación de cine para el mes de octubre con un nuevo eje en su cartelera: el Ciclo Volker Schlöndorff. El cineasta germano es una de las figuras clave del llamado Nuevo Cine Alemán. Después de su paso por París, donde participa como ayudante en algunas películas de Resnais, Malle o Melville, inicia su carrera cinematográfica con un cortometraje sobre la guerra de Argelia, que fue prohibido en Francia. Entre los títulos de esta pequeña muestra que se presenta en su homenaje, destacan: El joven Törless, El honor perdido de Katharina Blum y El tambor de hojalata, basada en la novela homónima de Günter Grass y con la que consiguió el Oscar a la mejor película de habla no inglesa así como la Palma de Oro del Festival de Cannes.
Volker Schlöndorff estará presente en el Centro Niemeyer el jueves, 13 de octubre, para ofrecer una charla después de la proyección de El tambor de hojalata en su versión restaurada digital. El encuentro será gratuito y abierto al público hasta completar aforo.
Por otro lado, la programación sigue con la excelente selección de Woody Allen, que nos acompaña a lo largo de este año. Durante este mes se proyectarán cuatro de sus imprescindibles: El ángel exterminador, Los olvidados, El discreto encanto de la burguesía y Ladrón de bicicletas. Otros títulos que se suman a la larga lista de grandes clásicos de la historia del cine seleccionada por el genio de Manhattan.
También continúa el Ciclo Jessica Lange, con motivo de la exposición “Unseen” que se puede ver en el Foyer del Auditorio hasta el próximo 27 de noviembre. Un viaje transversal y selecto por algunos de las mejores películas de la filmografía de esta maravillosa actriz, galardonada en dos ocasiones con un Oscar por la Academia de Cine norteamericana. Este mes, dos son los títulos de este ciclo: Frances y King Kong.
Se adjunta la cartelera completa y se recuerda que las entradas tienen un precio de tres euros y se pueden retirar en taquilla (Salvo el pase de El tambor de hojalata con la presencia de Volker Schlöndorff que será gratuito y libre hasta completar aforo).
Volker Schlöndorff (Alemania, 1939)
"Una película tiene que ser lo más concreta posible. Esto quiere decir que una película alemana, justamente para ser competitiva a nivel internacional, tiene que ser específicamente alemana. No creo que puedan producirse films sintéticos juntando los mejores componentes de sitios diferentes y pensando que vas a conseguir algo valioso."
Nacido en el seno de una familia de médicos, Volker Schlöndorff (1939) se formó en Francia, en el Instituto de Altos Estudios Cinematográficos (IDHEC), siendo ayudante de dirección entre 1960 y 1965 de Jean-Pierre Melvile, Alain Resnais y sobre todo de Louis Malle. Sin embargo, fue en la República Federal de Alemania donde rodó su primera obra, Wen Kummert's (1965), un cortometraje que evocaba la guerra de Argelia y que fue prohibido en Francia. Gracias a las primeras medidas adoptadas en el país para ayudar al cine de autor, Schlöndorff adaptó y dirigió la novela de Robert Musil El joven Törless (Der junge Törless, 1966): los interiores de una escuela de cadetes sirven al director para realizar una meticulosa descripción sobre la violencia humana al centrarse en cómo dos adolescentes se deleitan en la tortura y humillación de un tercero -de origen judío- ante los ojos del joven Törless, exculpado de participar pero implicado como testigo impasible. De esta forma, se establece un paralelismo entre el microcosmos del internado y la Alemania del tiempo nazi, donde los torturadores y perseguidores de judíos se mezclaban con millones de inocentes que observaban indolentes. Rodada en un poderoso blanco y negro, El joven Törless confirmó a la crítica internacional que el cine alemán comenzaba a experimentar un resurgimiento. De ella se llegó a afirmar que es "un estudio penetrante sobre la toma de conciencia de un joven y la representación más visceral de la deshumanización y del fascismo. En su facultad de expresar una atmósfera mórbida, llena de sospechas, este film se puede comparar con Diario de una camarera, de Luis Buñuel, donde el fascismo se cimenta en una sexualidad reprimida y en el sadismo".
Al contrario de las imágenes que invitan a la reflexión de Fassbinder o Wenders, el cine de Schlöndorff está orientado hacia una tradición realista, fuera de la experimentación y las vanguardias. De esta forma, no sólo alcanza a un público más amplio sino que también es el pionero de una "intención comercial" en el seno del Nuevo Cine Alemán. Sin embargo, los temas que trató no fueron ni mucho menos fáciles, sino críticos, complejos y comprometidos social e históricamente. Al mismo tiempo y más que ningún otro, Schlöndorff es el director alemán que ha mantenido una relación más estrecha con las obras literarias y su transposición a la pantalla grande: el citado Robert Musil, Bertolt Brecht, Heinrich von Kleist, Marguerite Yourcenar, Heinrich Böll, Günther Grass o Marcel Proust han tenido el honor de ser adaptados por el autor.
Tras El joven Törless, rodó varios films con resultados muy diversos: Mord und Totschlag (1967), que pasa por ser la primera obra del Nuevo Cine Alemán rodada en color; Michael Kohlhass (1969), primera y fallida producción internacional del NCA; Baal (1969), film para televisión con Rainer Werner Fassbinder como protagonista; y dos películas "de entretenimiento" de las que el director ha renegado ferozmente: Die Moral der Ruht von Halbfass (1971) y Ubernachtung in Tirol (1973). Los dos logros más importantes de la primera etapa de su carrera son sin lugar a dudas las excelentes La repentina riqueza de los pobres de Kombach (Der plötzliche reichtum der armen leute von Kombach, 1970), considerada por muchos su mejor obra; y Fuego de paja (Strohfeuer, 1972).
1974 será de nuevo un año decisivo para Schlöndorff. Su asociación con el director Reinhard Hauff para crear la productora Bioskop le lleva a dirigir la excelente El honor perdido de Katharina Blum (Der Verlorene ehre der Katharina Blum), protagonizada por la eficaz Angela Winkler, que da vida a un ama de llaves convertida en presa y víctima de la policía y la prensa sensacionalista por haber mantenido un contacto esporádico con un desertor del ejército y supuesto terrorista. La estilización a la que fueron sometidos los personajes y el pulso firme con que el director afrontó esta crítica social basada en la contradicción entre los principios de un estado liberal como el alemán y los más que reprobables métodos periodísticos y policiales presentes en él hicieron de Katharina Blum una de las grandes películas de la historia del NCA: "Aunque se han realizado varios films de crítica social, nadie ha puesto el dedo en la llaga del Estado tal y como lo hicieron Schlöndorff-Trotta en El honor perdido de Katharina Blum y Rainer Werner Fassbinder en su Viaje a la felicidad de mamá Küsters".
Con Tiro de gracia (Der Fangschuss, 1976), definida por el director como "la historia de una humillación culminada en una revuelta", creó una obra en blanco y negro austera y rigurosa a partir de la novela de Marguerite Yourcenar donde desfilan temas como la decadencia de la burguesía, la represión de la mujer y la liberación de ésta a partir de un acto extremo.
En 1979, Volker Schlöndorff dirige la que sin duda es su película más conocida y admirada: El tambor de hojalata (Die blechtrommel), por la que consiguió la Palma de Oro en el Festival de Cannes y el Oscar a la Mejor Película Extranjera. En un primer momento, esta obra maestra fue despreciada por la crítica literaria alemana. Sin embargo, la adaptación de Schlöndorff y Jean-Claude Carrière captó la complejidad, riqueza, escatología, el humor, la ironía, la crueldad y el barroquismo de la obra de Gunter Grass. El director encontró en David Bennent, el niño protagonista inseparable de su tambor de hojalata que se niega a crecer, a un auténtico artista inmejorable en su papel. Igualmente, Angela Winkler -que encarna a la madre del niño, casada con un nazi y amante de un polaco- encarna magistralmente las contradicciones de la ciudad donde transcurre la acción, Danzig, en la que los alemanes, los polacos, los judíos y los Kaschuben (minoría de origen eslavo) vivían en una mezcla armónica hasta que en 1933 empezaran las campañas nazis de persecución racistas, llenas de aires triunfalistas de guerra.
Círculo de engaños (Die Fälschung, 1981) será la última gran obra de Schlöndorff dentro del Nuevo Cine Alemán. Rodada en Beirut y protagonizada por Bruno Ganz, Hanna Schygulla y Jerzy Skolimowsky, se trata de una película sobre el fin de las ideologías que evoca el desconcierto provocado por un conflicto bélico absurdo.