ASTURIASDIARIO.-Algo ha cambiado, y para bien, en el Sporting que ahora juega mucho más entonado. Las sensaciones fueron buenas ante el Betis (0-0) y también ante el Athletic de Bilbao pese a la derrota (2-1). La dolorosa goleada del Alavés en el Molinón (2-4) fue la primera cornada en la ‘era Rubi’, que afortunadamente cicatrizó muy pronto tras el zarpazo del Sporting en Leganés, en un partido que ‘olía’ a vida o muerte, y donde estaban en juego mucho más que tres puntos.Cuatro partidos ha necesitado Rubi para sumar su primera victoria en el banquillo rojiblanco, y dar aire al Sporting. Con la salvación un poco más cerca (2 puntos), el Sporting recibe mañana al Atlético de Madrid, a la espera de que el Leganés pague el domingo en el Nou Camp los platos rotos y la debacle del Barça en la Champions. Si el Sporting gana mañana y el Leganés pierde el domingo, los rojiblancos saldrían de la zona peligrosa después de 15 jornadas consecutivas anclados en puestos de descenso. Pero en el fútbol de nada vale echar las cuentas de la lechera, y menos aún cuando te enfrentas a un Atlético de Madrid comandado por el Cholo Simeone. Al menos, los últimos antecedentes y resultados, juegan a favor del Sporting. Desde diciembre de 2008, el Atlético no sale triunfante y por la puerta grande del Molinón. Los últimos partidos entre asturianos y colchoneros a orillas del Piles, se han saldado con dos empates y dos victorias del Sporting.
Después de romper la pésima racha como visitante, que ya duraba más de un año (desde el 31 de enero de 2016, en Mestalla), el Sporting necesita volver a ganar en casa, donde no suma 3 puntos desde el pasado 4 de diciembre (contra el Osasuna). Por quinto partido consecutivo, habrá novedades, aunque pocas, en el once del Sporting. Carmona, convertido en el segundo máximo goleador del Sporting (lleva cinco goles), verá el partido desde la grada tras recibir la quinta tarjeta amarilla en Butarque. Al cierre de esta edición, Rubi aún dudaba entre Víctor Rodríguez, Isma López, o incluso el brasileño Douglas, para ocupar la plaza del polivalente centrocampista balear. Otra de las dudas a despejar, es sí Burgui jugará de inició, o si saldrá, como en Butarque, en la segunda parte para tratar de revolucionar el partido. Todo dependerá del recambio que utilice el técnico catalán para la banda derecha. Para completar la cuadratura del quinto ‘once’ de Rubi, habrá que ver qué tres jugadores formarán el trivote defensivo y al mismo tiempo creador del centro del campo. Mikel Vesga se ha ganado una plaza fija como timón del equipo. Nacho Cases, Sergio, y Moi Gómez, se disputan las otras dos plazas, ya que Xavi Torres puede que vuelva a ser el descartado como ya sucedió en los dos últimos partidos. Finalmente, y como punta de lanza, es muy probable que el gigantón Lacina Traoré juegue desde el minuto uno, completando el 4-1-4-1- de este nuevo y renacido Sporting.
En el Atlético de Madrid, Simeone también tiene dudas y tendrá que reservar jugadores pensando en la eliminatoria europea que le viene encima. Saúl arrastra molestias y Godín no se ha recuperado del todo de su lesión. El ‘Cholo’, probablemente, reservará al rocoso central uruguayo para el partido que disputará el martes contra el Bayern Leverkussen. Aún así, el Sporting se enfrenta mañana a un Atlético de Champions, con Griezmann y el Niño Torres enchufados, y especialistas en perforar la portería del Sporting (6 goles en 4 partidos). Pese a todo, el Atlético ha perdido fuelle esta temporada. En los últimos cuatro partidos, los colchoneros han sumado dos empates y dos victorias, la última contra el Celta, con remontada incluida (3-2). El equipo de Simeone lleva 7 partidos sin perder, los mismos que llevaba el Sporting sin ganar hasta la semana pasada. Ambos equipos tienen urgencias, y el empate les serviría de muy poco. En lo que va de temporada, el Sporting solo ha ganado 3 de los 10 partidos que ha disputado en El Molinón. Ganar al Atlético de Madrid, que esta temporada ya perdió en Sevilla, San Sebastián, y Villarreal, no es una misión imposible. Lejos del Calderón, los colchoneros flaquean, y el Sporting ha recuperado la fe.