Quito (Pichincha) Andes.- Con un reconocimiento a los ciudadanos que salieron a las calles a defender la democracia, el presidente ecuatoriano Rafael Correa participó en el evento conmemorativo por el aniversario de la intentona golpista del 30 de septiembre de 2010.

Ante unas 200 mil personas que se movilizaron frente a la sede del movimiento oficialista Alianza PAIS, el mandatario evocó también a las víctimas mortales del suceso: los militares Darwin Panchi y Jacinto Cortez; el policía Froilán Jiménez, y el estudiante Juan Pablo Bolaños.

Correa señaló que no se trataba de un festejo, sino un acto “para recordar y jamás perder la memoria de uno de los días más tristes de nuestro país”.

No obstante, sostuvo que pese al dolor y la tristeza, “no podemos darnos por vencidos y debemos seguir adelante con esta revolución ciudadana. Que de ese dolor salgan fuerza compromisos para no dar un paso atrás”.

Reprochó a “la prensa corrupta” que “infantil y ridículamente” sostiene que el 30 de septiembre no pasó nada y después “rasgándose las vestiduras dicen que no se avanza en la investigación”.

Advirtió que pese a darse pasos gigantescos para que se entienda que el tiempo de los golpistas ya pasó, aún “somos vulnerables”.

“El 30 de septiembre recibimos balas, gases, bombas de verdad, que pudieron terminar con nuestra vida, sin embargo, si vuelve a pasar este 30 de septiembre, volveremos a actuar como aquel aciago día, diciendo: de aquí salgo como presidente o como cadáver, pero jamás claudicaremos en nuestros principios”, subrayó.

Mencionó que en la sublevación policial se conjugaron los peores vicios: algunos policías que lucharon por mantener sus espacios de corrupción, que respondían a los EEUU y a políticos dependientes de ese país.

Sostuvo que detrás de esos policías hubo políticos que pensaban que iba a tener éxito su intentona y se adelantaron a celebrar con whisky en un hotel de Quito.

MILES DE ECUATORIANOS

Cerca de las 15:00 de este viernes 30 de septiembre miles de ciudadanos salieron a las calles del norte de Quito, el motivo conmemorar el triunfo de la democracia. A esta misma hora hace un año el pueblo ecuatoriano caminaba con el mismo entusiasmo pero hacia el Hospital de la Policía Nacional para pedir la libertad del Presidente de República, Rafael Correa, quien permanecía secuestrado en esa casa de salud. Al cumplirse un año de la intentona golpista, miles de ciudadanos asistieron  a la avenida de los Shyris para conmemorar aquel fatídico día y rendir homenaje a esos cinco ecuatorianos que perdieron la vida en medio de la revuelta policial.

Peter Zambrano, viajó durante un día entero desde Machala a Quito para ratificar su apoyo al Presidente. "No importa el viaje, ni la distancia, estamos respondiendo con un sí a todas esas obras que se ven a lo largo del país", indicó.

Al encuentro democrático llegaban hombres, mujeres con niños en brazos, jóvenes todos motivados por el espíritu democrático caminaban por las calles aledañas al parque La Carolina, con la fuerza patriótica que todos tenemos.

Héctor Ibarra, es una persona con capacidades especiales, vino desde Esmeraldas para decir "Viva la Democracia". Recordó el dolor que causó la rebelión policial en la ciudadanía por ello dijo que está presente para que el 30S no se repita nunca más.

Ibarra acompañado de sus dos muletas continua el camino, el dice que "mira hacia adelante, así como este país avanza. Solo hacia adelante".

Mientras entre la muchedumbre se pierde Héctor, se nos acerca un grupo de españoles quienes  querían decirnos que "Ecuador no puede desmayar, es el momento de que continúe con el cambio", aseguró José Luis Molina.

"Creo que este país en estos años ha vivido un cambio extraordinario y este proceso no puede cambiar y quieren mantener la democracia con este apoyo", puntualizó.

Habían pasado tres horas y esta principal avenida capitalina se había llenado, resultaba imposible caminar, todos con banderas tricolor en la mano, coreaban "el pueblo unido jamás será vencido", mientras el Primer Mandatario subía a la tarima que se ubicó frente a la Tribuna de los Shyris.

El mensaje del respeto irrestricto a la democracia quedó claro, un pueblo unido y que reconoce la gestión de la Revolución Ciudadana estará vigilante para que esta se respete./CY Prensa Presidencial