La Oficina de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos expresó hoy gran preocupación por los recientes asesinatos y ataques brutales a periodistas en México, que ilustran el deterioro de la libertad de expresión en ese país. El portavoz de esa Oficina, Rupert Colville, subrayó la vulnerabilidad de los profesionales de la información en México y recordó que sólo en septiembre la ONU ha condenado públicamente cuatro crímenes.
Colville se refirió al asesinato de María Elizabeth Macías, del periódico Primera Hora, de Nuevo Laredo, quien fue decapitada y mutilada el fin de semana pasado y apareció con un mensaje que explicaba el asesinato como consecuencia de sus críticas a los grupos criminales.
El portavoz citó asimismo el mensaje amenazando a los usuarios del internet colgado junto con los cuerpos de dos civiles en la misma ciudad fronteriza.
“Es claro que esos asesinatos son cometidos para enviar mensajes perturbadores que silencien la información sobre la violencia de los narcotraficantes. También buscan desafiar las campañas de las autoridades que promueven la notificación anónima de cualquier actividad criminal”, dijo.
Colville afirmó que es extremadamente preocupante la impunidad que rodea a estos casos, al igual que a crímenes similares cometidos en los últimos años.
Agregó que es alarmante que algunos de estos crímenes parecen haber sido cometidos con la cooperación o consentimiento de agentes estatales.
En este sentido, urgió a las autoridades de México a investigar a fondo y de manera imparcial estos incidentes.
Del mismo modo, recordó al gobierno su obligación de proteger a la población