“La línea F7 (Oviedo-San Esteban) le queda como mucho un año de vida, sino sube la ocupación de los trenes”, -así de categóricos se muestran desde “Asturias al Tren”.
La preocupación no es para menos, desde que se ha sabido que el Ministerio de Fomento está haciendo estudios de ocupación de las líneas con la idea de recortar las subvenciones a las cercanías en Asturias y cuyos servicios sólo se mantendrían si una parte los sufragase el Gobierno del Principado de Asturias, algo que los usuarios califican de “improbable”.
La línea F7 tiene una ocupación media del 17 %, es decir, va con un 83 % de plazas vacías y parece ser, por tanto, la “candidata” al cierre más inminente, sino se acometen reformas de calado tanto horarias como de servicios que atraigan nuevos pasajeros.
Frente a la postura de los sindicatos, de mantener el mismo servicio a los apeaderos, desde “Asturias al Tren no dudan de calificarla como “muy peligrosa y dañinaa” para la supervivencia de la línea. “El área rural no aporta ni el 5 % de los pasajeros de toda la red y guste o no hay apeaderos vacíos que tienen que desaparecer y otros reducir drásticamente su servicio, porque sino el ferrocarril de cercanías va a desaparecer completamente. Algunos deberían bajar de las nubes y pisar de una vez el suelo. Tenemos la molesta sensación de que los sindicatos y algún partido político sólo esperan el cierre para lamentarlo y poco más, porque sino no se entiende su obstinada oposición a realizar reformas horarias y de servicios. Puede que ellos no cierren la línea formalmente, pero con su postura dogmática están ayudando al Ministerio de Fomento a llevar el ataúd a la tumba”.
Todos los expertos y técnicos en movilidad, incluidos los del Gobierno del Principado de Asturias, coinciden que si se quiere que las cercanías capten más pasajeros necesitan ser más rápidas y a cortar tiempos de viaje, con pocas paradas, entre los núcleos medios y grandes. Pero la implantación de ese tipo de servicios choca con el interminable rosario de apeaderos vacíos, donde los trenes se ven obligados a parar por decenas diariamente, haya o no pasajeros.
“Asturias al Tren” viene reclamando hace tiempo que “desaparezca” esa situación, que daña gravemente la rentabilidad social y la sostenibilidad de las líneas de cercanías en la región.
Están de acuerdo en crear un frente común o plataforma en defensa de las infraestructuras ferroviarias y la modernización de las mismas, pero juzgan que es irreal apostar por un servicio de paradas desfasado, que los asturianos mayoritariamente rechazan utilizar (hay recorridos en tren que triplican el tiempo en relación al coche).
“Hay que defender el ferrocarril, pero sobre bases nuevas, apegadas a la realidad de la movilidad que Asturias tiene en pleno siglo XXI y no pensando en el siglo pasado. El 85 % de la población se concentra en el área central en núcleos medios y grandes y por tanto los servicios ferroviarios tienen que a tender y volcarse fundamentalmente a cubrir esa necesidad. La mayoría de los apeaderos vacíos tienen que desaparecer, sean rurales o no”.
Asturias al Tren pedirá al Gobierno del Principado de Asturias y a todos los agentes sociales implicados, así como a los ayuntamientos afectados que apoyen la propuesta de reforma que plantean porque consideran que es la única vía razonable para salvar la línea. “Mientras otros se dedican al postureo imposible y no se quieren mojar, Asturias al Tren pone soluciones encima de la mesa para salvar la línea, con la única propuesta sensata que hay para evitar el cierre total. Si alguien tiene una idea mejor que la exponga, pero que se dé prisa, porque si no dentro de un año ya será demasiado tarde”.
La reforma que propone Asturias al Tren para la línea F7.
Antecedentes.
El servicio actual entre Oviedo y San Esteban está en 1.15 minutos, con un total 20 estaciones y apeaderos. Los servicios son cada hora de lunes a viernes y los sábados, domingos y festivos cada dos horas, parando en todos los sitios.
“Asturias al Tren” plantea la implantación de servicios semi-directos que harían que la duración del viaje pasará a menos de una hora. En este caso las paradas serían: Oviedo, Vallobín, Argañosa, San Claudio, Trubia, Grado, San Román y Pravia de lunes a domingo. A la estación término de la línea, San Esteban, sólo irían los servicios de parada facultativa cada 2 horas. No se contempla la parada en Las Campas tampoco, pues tiene servicios semi-directos más que suficientes que ya presta otra línea.
El servicio de todo paradas sería cada 2 horas de lunes a domingos, añadiendo a las fijas las siguientes facultativas: San Pedro de Nora, Santa María, Vega, Sandiche y Beifar.
Desaparecerían definitivamente: Las Mazas (tiene servicio de autobús y el apeadero de Las Campas a 2 kms y con acera), Soto de Udrión, Peñaflor (tiene la estación de Grado a 2 kms por acceso seguro), Aces (estación de San Román a 2 kms) y San Ranón.
Con ésta propuesta el tiempo de recorrido de 40 minutos entre Oviedo y Grado pasaría a 30 minutos o algo menos y a Pravia que hora es de 1 hora a 40-45 minutos. Con estos tiempos de viaje el tren podría competir claramente con los servicios de Alsa.
“Asturias al Tren” es consciente que su propuesta requiere los correspondientes ajustes técnicos que los gestores ferroviarios consideren necesarios para el buen funcionamiento de la malla de la red.
“Ofrecemos nuestra colaboración y por ello hemos solicitado una entrevista de nuevo a la Consejera de Infraestructuras y Ordenación del Territorio para realizar una propuesta formal conjunta de horarios y de servicios, para presentarla a Renfe-Operadora, no sólo para ésta línea concreta, sino para todas. Hay que pasar a los hechos ya. Defender a ultranza la red de apeaderos vacíos no es realista y tiene que cambiar, más cuando el PP y el PSOE se han negado históricamente a duplicar vías. Con esa carencia de infraestructura los servicios de todo paradas y los semi-directos no caben en la misma vía única, salvo que se modifiquen los primeros en favor de los segundos. Quien sostenga lo contrario está haciendo pura demagogia y engañando a los asturianos.”