La Agrupación Asturiana de Vendedores al por Menor de Carburantes y Combustibles (ASVECAR), en la que se integran más del 60% de las estaciones de servicio de Asturias, entre ellas las pertenecientes a los grandes operadores petrolíferos, hace un llamamiento al Gobierno del Principado de Asturias para que siga el ejemplo de Navarra, comunidad donde a partir de 2017 se suprimirá el Impuesto de Venta Minorista de Determinados Hidrocarburos, más conocido como céntimo sanitario.
La Comisión de Economía, Hacienda, Industria y Empleo del Parlamento de Navarra aprobó ayer, 13 de diciembre, un dictamen en relación con el proyecto de ley foral de modificación de diversos impuestos y otras medidas tributarias en el que se contempla la supresión de dicho céntimo sanitario por el que hasta ahora se aplicaba en esta comunidad autónoma un recargo de 2,4 céntimos por litro de gasolina, gasóleo o queroseno, otro de 0,6 céntimos al litro de gasóleo agrícola especial y de calefacción y un euro por tonelada de fuelóleo. En el caso del Principado de Asturias, el recargo es de 4,8 céntimos por litro de gasolina y 4 céntimos por litro de gasóleo. De esta forma, Navarra se suma a las autonomías que han ido suprimiendo este impuesto, que en el caso de Asturias está provocando una caída de ventas ya que muchos consumidores –y principalmente los transportistas- optan por repostar en las comunidades vecinas de Cantabria o Castilla y León, donde no se aplica y por lo tanto resulta más barato repostar.

Asvecar no sólo denuncia el impacto negativo que el “céntimo sanitario” tiene en el sector regional de las estaciones de servicio, sino que quiere volver a manifestar que la aplicación de este impuesto supone una merma para las arcas de la Administración regional por la pérdida de recaudación fiscal en términos de IVA y en el impuesto de hidrocarburos como consecuencia de la perdida de venta de litros de combustibles en Asturias.