Un camión lleno de mobiliario clínico se incorporará a la próxima caravana solidaria que parta de Asturias con ayuda para la población refugiada

Más de 350 piezas del complejo de El Cristo han sido reaprovechadas antes de subastar el resto de objetos

La Consejería de Sanidad cederá material sanitario del viejo Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) en buen estado de conservación pero que ha acabado su vida útil en el Principado para renovar el equipamiento de los hospitales de la población saharaui refugiada en los campamentos de Tindouf, en Argelia. El camión que transportará este cargamento se incorporará a la próxima caravana solidaria impulsada por la Agencia Asturiana de Cooperación al Desarrollo que parta del Principado.

El consejero de Sanidad, Francisco del Busto, ha anunciado esta decisión al ministro de Salud Pública del Gobierno Saharahui, Mohamed Lamin, durante el encuentro que han mantenido hoy y al que han asistido también responsables de Médicos del Mundo, organización que ha actuado como asesora del Ministerio de Salud Pública Saharaui; la directora de la Agencia de Cooperación al Desarrollo, Gimena Llamedo, y la directora de Planificación Sanitaria, Concepción Saavedra.

El núcleo de los equipos entregados está formado por mobiliario clínico asistencial en perfecto estado de uso: camas, camillas de exploración, cunas, sillas, palos de gotero, negatoscopios, pulsioxímetros, archivadores y carros de curas. En su mayoría se trata de equipamiento básico y de reutilización inmediata, tanto en el Hospital Nacional de Rabouni como en los cuatro regionales de las Wilayas.

El Gobierno saharaui planteó la petición al Principado a finales de 2014, con el fin de recibir el material del viejo HUCA que no se pudiera reutilizar en centros asistenciales asturianos. El listado fue elaborado por las propias autoridades sanitarias saharauis, con el apoyo del personal de Médicos del Mundo en el terreno, y canalizado a través de esta misma organización hacia el Ejecutivo autonómico.

La selección y marcaje de los equipos que viajarán a los campamentos de refugiados se llevó a cabo en el primer semestre de este año, una vez que las gerencias de las áreas sanitarias asturianas y otros centros y servicios asistenciales de la región habían seleccionado el equipamiento y el mobiliario del viejo HUCA más apto para sus necesidades.

La entrega de este material culmina un largo proceso de gestión de los bienes del viajo HUCA que comenzó con el reaprovechamiento de los materiales, primero entre los centros del Servicio de Salud del Principado (Sespa), luego en otros de la propia Administración y finalmente en otras instituciones públicas. Mediante este procedimiento, se han entregado cerca de 350 piezas de mobiliario a centros como el Instituto de Medicina Legal, la Facultad de Medicina, el Hospital de Jove, el Instituto Asturiano de Administración Pública Adolfo Posada, el Centro Integrado de Cerdeño o el Ayuntamiento de Llanera, entre otros. Se trata de equipos informáticos, lámparas, básculas, archivadores, armarios, sillas, cunas, estanterías, negatoscopios, aspiradores, carros de transporte, bicicletas estáticas, camillas y básculas, aunque la donación también incluyó objetos singulares como un microscopio quirúrgico, respiradores, tensiómetros,  desfibriladores y dispensadores de parafina.

El resto de los materiales, ya sin valor, ha sido adjudicado mediante un proceso de subasta pública.

Otras líneas de colaboración

La Administración sanitaria mantiene actualmente varias líneas de apoyo a las personas asentadas en los campamentos saharahuis. Por un lado, los hospitales del Principado prestan atención a pacientes evacuados de los campamentos por razones de salud, bien en régimen ambulatorio o de hospitalización. La mayoría de estas personas se alojan en la casa de acogida que financia la Agencia Asturiana de Cooperación al Desarrollo.

Además, los saharauis residentes en Asturias gozan de asistencia sanitaria a través del documento que facilita la consejería para la atención a inmigrantes sin recursos. Los menores que visitan Asturias cada año con el programa Vacaciones en paz y sus monitores se someten a una revisión médica general y se actualiza su calendario vacunal.

Por último, gracias a la colaboración de Médicos del Mundo, la Comisión Médica de Medicina Interna y Endocrinología se desplaza una o dos veces al año a los campamentos para atender a quienes lo necesiten.