Los accesos a la Zalia por la Peñona, con 26,2 M€, se licitarán de inmediato

Los accesos a la Zalia por la Peñona, con 26,2 M€, se licitarán de inmediato

Belén Fernández señala que el nuevo proyecto introduce mejoras y preserva el club de tiro de Ensidesa, sin incurrir en retrasos significativos


 

Gijón.-La consejera de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, Belén Fernández, ha confirmado hoy la aprobación del proyecto y de la propuesta para licitar las obras del acceso a la Zona de Actividades Logísticas (Zalia) por la Peñona, que cuentan con un presupuesto de 26,2 millones de euros.

 

Fernández ha realizado este anuncio en el pleno de la Junta General del Principado celebrado hoy, donde ha asegurado que la obra podrá avanzar sin interrupciones y a buen ritmo, después de que el Ejecutivo haya solucionado los problemas surgidos tras la rescisión de mutuo acuerdo del contrato con la empresa adjudicataria, el pasado mes de noviembre.

 

Esta circunstancia ha permitido, en su opinión, disponer de un proyecto que corrige los errores detectados e introduce mejoras para la red y para los usuarios, que permiten respetar una actividad deportiva de hondo arraigo en la zona como es el club de tiro de Ensidesa, cuyas afecciones se evitan ahora en su práctica totalidad.

 

Igualmente, el proyecto incluye la reparación integral de los 2.712 metros de la carretera AS-326 Tabaza-Tremañes, entre la Zalia y la intersección con el polígono de Somonte. Una obra que permitirá distribuir los tráficos del nuevo viario y acceder desde esta carretera regional a las numerosas instalaciones industriales y empresas del entorno.

 

El proyecto también tiene en cuenta la construcción de la autovía de acceso al Puerto de El Musel por Lloreda licitada por el Ministerio de Fomento, y, en consecuencia, elimina un tramo de unos 400 metros que se solapaba con el tramo que es competencia del Gobierno central.

 

Por último, la consejera ha adelantado que el cambio apenas generará retrasos, ya que la finalización de los desbroces y despejes, la eliminación del tramo,  la disponibilidad de los terrenos y los avances en la remoción de muchos de los servicios afectados por el trazado permiten reducir el plazo de ejecución a 22 meses, ocho menos que los de la obra rescindida.

 

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