Quito, 4 oct (Andes).- El catedrático franco-español Ignacio Ramonet planteó en un artículo las que considera las “10 claves que explican el nuevo sistema mundo”, a partir de un análisis geopolítico para comprender la realidad y asumir los retos globales del mundo contemporáneo y los que acecharán hasta el 2030.
Ramonet, Profesor Emérito de la Universidad de Paris y director de 'Le Monde Diplomatique', señala como el primer punto el declive de Occidente, al señala que ha comenzado la fase final de un ciclo de cinco siglos de dominación occidental del mundo, mientras el liderazgo internacional de Estados Unidos se ve amenazado por el surgimiento de nuevos polos de poderío (China, Rusia, India) a escala internacional, aun cuando sigue siendo unas de las potencias planetarias.
“El "desclasamiento estratégico" de Estados Unidos ha empezado. El "siglo americano" parece llegar a su final, a la vez que va desvaneciéndose el "sueño europeo"..., advierte, y añade que ese país ya no ejercerá su "hegemonía militar solidaria" como lo hizo desde el fin de la Guerra Fría, en 1989, y por el contrario transitamos a un mundo multipolar con nuevos actores como China, Rusia, India.
Apuntó que la parte de los países occidentales en la economía mundial va a pasar del 56% hoy, a un 25% en 2030, con lo cual en menos de quince años, Occidente perderá más de la mitad de su preponderancia económica, y ya Estados Unidos y sus aliados no tendrán los medios financieros para asumir el rol de gendarmes del mundo.
La imparable emergencia de China, como ‘la gran potencia en ciernes del siglo XXI’, es otro de los puntos que señala Ramonet, tras convertirse ya en la segunda potencia económica del mundo, por delante de Japón y Alemania, lo que Washington trata de frenar, “cercándola con bases militares y apoyándose en sus socios tradicionales (Japón, Corea del Sur, Taiwán, Filipinas).
El terrorismo yihadista es otro de los elementos a considerar que menciona el también autor de libros como ‘Propagandas silenciosas o guerras del siglo XXI’, entre otros, al indicar que las causas -tanto del practicado por Al Qaeda como por la Organización Estado Islámico o Daesh (ISIS, en inglés), hay que buscarlas "en los desastrosos errores y los crímenes cometidos por las potencias que invadieron Irak en 2003. Además de los disparates de las intervenciones en Libia (2011) y en Siria (2014)".
“La lucha contra el terrorismo también está autorizando, en materia de gobernación y de política interior, todas las medidas autoritarias y todos los excesos, incluso una versión moderna del «autoritarismo democrático» que toma como blanco, más allá de las organizaciones terroristas en sí mismas, a todos los insumisos y protestatarios que se oponen a las políticas globalizadoras y neoliberales", reflexionó.
Crisis económica, decepción, seísmos, ciberguerra y ciberdefensa, mutación del capitalismo, urbanidad y clases medias
Ramonet señalo que los países siguen padeciendo las consecuencias del ‘terremoto económico-financiero’ de la crisis de 2008, y al menos en Europa esta se prolongará por al menos un decenio más, es decir hasta por lo menos 2025.
“Las repercusiones sociales de ese cataclismo económico han sido de una brutalidad inédita: 23 millones de desempleados en la Unión Europea y más de 80 millones de pobres… Los jóvenes en particular son las víctimas principales; generaciones sin futuro. Pero las clases medias también están asustadas porque el modelo neoliberal de crecimiento las abandona al borde del camino”, apuntó.
“O sea, enfrentamos una auténtica crisis sistémica del mundo occidental que afecta a la tecnología, la economía, el comercio, la política, la democracia, la identidad, la guerra, el clima, el medio ambiente, la cultura, los valores, la familia, la educación, la juventud, etcétera”, alerta.
La decepción y el desencanto tras la crisis financiera de 2008, en su opinión, persiste, e incluso la propia democracia, como modelo, ha perdido credibilidad. “Los sistemas políticos han sido sacudidos hasta las raíces. En Europa, por ejemplo, los grandes partidos tradicionales están en crisis”, apuntó al asegurar que el paisaje político aparece radicalmente transformado.
Los seísmos (sismos) financieros, monetarios, bursátiles, climáticos, energéticos, tecnológicos, sociales y geopolíticos, asegura, son otra gran característica del Nuevo Sistema Mundo, mientras el ciberespionaje y la ciberdefensa también se imponen.
“Casi todas las crisis recientes tienen alguna relación con las nuevas tecnologías de la comunicación y de la información, con la desmaterialización y la digitalización generalizadas, y con la explosión inaudita de las redes sociales. Más que una tecnología, Internet es pues un actor fundamental de las crisis. Basta con recordar el rol de WikiLeaks, Facebook, Twitter y las demás redes sociales en la aceleración de la información y de la conectividad social a través del mundo”, aseveró.
En su opinión, la mutación del capitalismo hacia la economía colaborativa se impone, lo cual implica “ir abandonando poco a poco una economía basada en la sumisión de los consumidores y en el antagonismo o la competición entre los productores, y pasar a una economía que estimula la colaboración y el intercambio entre los usuarios de un bien o de un servicio”.
“Muchos indicios nos conducen a pensar que estamos asistiendo al ocaso de la 2ª revolución industrial, basada en el uso masivo de energías fósiles y en unas telecomunicaciones centralizadas. Y vemos la emergencia de una economía colaborativa que obliga, como ya dijimos, al sistema capitalista a mutar”, comentó.
En tanto, las ‘amenazas no militares’ avanzan, según un reciente informe de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), ya que la tecnología y los ‘futuros magnates de internet’ (Google y Facebook) controlan una masa de datos incalculables. También se teme que el terrorismo yihadista sea sustituido por un ciberterrorismo aún más sobrecogedor.
Por último señala el ‘triunfo de las ciudades y de las clases medias’, ya que el 60% de las personas vivirán, por primera vez en la historia de la humanidad, en las ciudades. Y, como consecuencia de la reducción acelerada de la pobreza, las clases medias serán dominantes y triplicarán, pasando de los 1.000 a los 3.000 millones de personas.
“Esto, que en sí es una revolución colosal, acarreará como secuela, entre otros efectos, un cambio general en los hábitos culinarios y, en particular, un aumento del consumo de carne a escala planetaria. Lo cual agravará la crisis medioambiental”, apuntó.
Concluyó que en 2030, los habitantes del planeta sumarán 8.500 millones, pero el aumento demográfico cesará en todos los continentes menos en África, con el consiguiente envejecimiento general de la población mundial. "En cambio, el vínculo entre el ser humano y las tecnologías protésicas acelerará la puesta a punto de nuevas generaciones de robots y la aparición de “superhombres” capaces de proezas físicas e intelectuales inéditas", precisó.
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fuente. http://www.andes.info.ec/es/noticias/catedratico-ramonet-plantea-10-claves-sistema-mundo-asumir-retos-globales-hasta-2030.html
