La reciente solicitud palestina de adhesión a las Naciones Unidas como miembro de pleno derecho, que implicaría reconocerla como Estado, no despierta reacciones unánimes en la Eurocámara. Mientras unos lo ven como una medida legítima, otros lo consideran una provocación unilateral. Proinsias de Rossa, jefe de la delegación del PE para las Relaciones con el Consejo Legislativo Palestino, y Bastiaan Belder, presidente de la delegación para las relaciones con Israel, exponen su punto de vista en esta entrevista especial "a dos".
¿Cuál es su posición sobre la solicitud realizada por Mahmoud Abbas? ¿Debería Naciones Unidas volver la configuración de Estado previa a 1967?
Proinsias De Rossa: Es probable que la ONU diga no si se produce una votación formal, porque Estados Unidos ya ha anunciado que ejercerá el derecho de veto. Pero realmente no existe justificación alguna, ni moralmente, ni desde el punto de vista del derecho internacional. No es contradictorio que ingresen como miembro de Naciones Unidas y que por otro lado continúen las negociaciones para constituirse en Estado.
Sobre el tema de las fronteras, el presidente Obama ya apuntó la solución: la línea verde de 1967 con intercambio de tierras. Los palestinos aceptaron mientras que la respuesta de Netanyahu fue negativa. El obstáculo se encuentra por tanto en el lado israelí.
Bastiaan Belder: En primer lugar ¿en nombre de quién habla Mahmoud Abbas? Hamas ya dejó claro que no comparte su posición. Así que ¿es un socio válido para alcanzar la paz en Israel? Hay una reconciliación pero no un gobierno unificado. La segunda cuestión sería el grado de legitimidad de un presidente que ha pospuesto varias elecciones.
Para mí, el problema fundamental es que Mahmood Abbas rechaza tratar la posibilidad de una solución con dos estados, uno judío junto con otro palestino. Ha actuado de manera unilateral sin contar con el respaldo del pueblo palestino. Se trata de una ofensiva propagandística por parte de la Autoridad Palestina, que desde mi punto de vista se encuentra totalmente dividida y débil.
¿Qué cambio supondría para la gente el reconocimiento de Palestina por parte de Naciones Unidas?
Proinsias De Rossa: Cambiaría su percepción de quiénes son y les garantizaría la dignidad de pertenecer a una familia internacional de naciones. Dado que los palestinos aceptaron hace más de 20 años la línea verde como frontera del Estado de Israel, que supone el 22 por ciento del territorio palestino original antes de la partición de 1947, deberían contar con un asiento en la ONU.
También supondría otorgar a los negociadores palestinos un estatus de igualdad. Hay un claro desfase en términos de poder y recursos en favor del lado israelí.
Bastiaan Belder: Ese es el gran problema. ¿Debería realmente producirse un cambio? Mahmoud Abbas quiere valerse de una mejora, por ejemplo un estatus de observador como el del Vaticano, para presentar acusaciones ante la Corte Penal Internacional. Una vez más hablamos de confrontación, no de paz.
Abbas dice acudir a las Naciones Unidas después de tanto tiempo porque no existe una propuesta real de paz. Pero en el año 2000 Yasser Arafat rechazó una en dos ocasiones, y Abbas hizo lo propio en 2008. Lo lamento mucho porque así no se ayuda a ambos pueblos.
La Unión Europea es el mayor donante de ayuda a la Autoridad Palestina. ¿Cuál debe ser su posición en este asunto? ¿Es posible fijar una posición común?
Proinsias De Rossa: Hasta ahora, desafortunadamente la UE no ha encontrado una posición común. Los Estados miembros cometen un error al pensar que se debe elegir entre que ingresen en la ONU o que las negociaciones para la construcción de un Estado continúen.
Cuando hablo con los palestinos, su única preocupación es saber si las negociaciones se reanudarán. Sus tierras están siendo tomadas por colonos israelíes. Tal y como un palestino me explicó, es como negociar el reparto de una pizza mientras la otra parte se la sigue comiendo.
Por las palabras de Obama la pasada semana, se puede deducir que los palestinos no deben esperar más concesiones de Estados Unidos antes de las elecciones. La Unión Europea debe tomar la iniciativa y actuar como mediador.
Todos los Estados miembros quieren un Estado palestino independiente como resultado de una negociación. Todos ellos han reconocido el enorme progreso que Abbas y Fayyad (Primer Ministro de la Autoridad Palestina) han logrado a la hora de poner a las instituciones en su sitio. Debemos permanecer todos unidos para llevar las negociaciones a un punto de partida y poder así concluirlas.
Bastiaan Belder: La Unión Europea firmó los acuerdos de Oslo, los cuales especifican que no debe producirse un paso unilateral por ninguna de las partes. Por ello, debería seguir ciñéndose a esta postura en la mesa de negociación y pedir sin ambages a los palestinos que sienten con los israelíes. Lo que el Cuarteto (grupo formado por Rusia, EE.UU., la UE y la ONU para la resolución del conflicto árabe-israelí) exigió fue negociar. Israel aceptó y los palestinos lo rechazaron. Ahora están reconsiderando su postura y espero que terminen por volver a la mesa de negociaciones. La Unión Europea debe ser clara al respecto
FOTO: Proinsias De Rossa (socialista, Irlanda) y Bastiaan Belder (Europa de la libertad y la Democracia, Países Bajos)