La consejera de Medio Ambiente anuncia nuevas medidas para atajar la polución de origen industrial que se registra en la estación de Matadero, en el puerto avilesino
Un informe concluye que las emisiones de dióxido de nitrógeno asociadas al tráfico son el principal riesgo a corto plazo para las enfermedades respiratorias y circulatorias en Asturias
La consejera de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, Belén Fernández, ha informado hoy que la contaminación por partículas continúa descendiendo en las ciudades de Gijón y Avilés, durante las reuniones de las comisiones de seguimiento constituidas para vigilar y hacer cumplir las medidas incluidas en los dos planes de calidad del aire elaborados en 2014 para la zona de Avilés (denominada Asturias Central) y para la aglomeración de Gijón. La responsable autonómica en materia de Medio Ambiente ha informado de que las versiones revisadas y actualizadas de estos documentos saldrán a información pública antes de que concluya el año.
Las reuniones de hoy, a las que han asistido autoridades locales y regionales, vecinos, ecologistas y responsables portuarios, también han servido para dar a conocer los resultados de un informe epidemiológico incluido como línea de actuación en el Plan de Mejora de la Calidad del Aire en la Aglomeración de Gijón en el que se analizan las consultas por asma en los centros de salud y los ingresos hospitalarios urgentes en los hospitales por enfermedades respiratorias y cardiocirculatorias. El estudio, elaborado por la Dirección General de Salud Pública, ha analizado los datos de los contaminantes a los que la Organización Mundial de la Salud se refiere como los más problemáticos para la salud (SO2, NO2, PM y O3) provienen de 16 estaciones de medición de la red del Principado de Asturias en las tres zonas de estudio: cinco en Avilés, cinco en Gijón y seis en Oviedo.
El trabajo Calidad del aire y salud en Asturias revisa, por ejemplo, los 746.889 ingresos urgentes de los hospitales San Agustín (Avilés), Cabueñes y Jove (Gijón) y HUCA (Oviedo), durante trece años (2003-2015), y analiza 206.519 (28%) para estudiar la asociación con contaminantes atmosféricos. La explotación de esos datos permite determinar, entre otras cuestiones, que el efecto de los contaminantes se manifiesta fundamentalmente sobre las enfermedades respiratorias y en menor medida sobre las circulatorias y que el dióxido de nitrógeno (NO2) es el principal factor de riesgo a corto plazo para las enfermedades respiratorias y circulatorias, seguido de las partículas (PM) y del dióxido de azufre (SO2), mientras que en Asturias el Ozono (O3) no plantea en la actualidad problemas de salud a la población.
Igualmente, pone de manifiesto que las concentraciones de contaminantes PM, NO2 y principalmente SO2 medidas en las estaciones de la red han descendido paulatinamente desde 1996. Añade también que las concentraciones de NO2 y PM, presentes en 2015 en las zonas de Llano Ponte, en Avilés, y Palacio de los Deportes, en Oviedo, están muy correlacionadas y son generadas en gran parte por el tráfico, de forma que las medidas orientadas a gestionar el tráfico de vehículos producirán presumiblemente un descenso de ambos contaminantes.
Por su parte, advierte de que la estación de Matadero, ubicada en el puerto de Avilés, presenta los valores más altos de partículas en suspensión (PM). Tanto en ésta como en la estación de Llaranes, que no están próximas a zonas de circulación intensa, predominan las partículas de origen industrial.
La consejera ha anunciado que, a la vista de estos resultados y de la evolución de los datos de contaminación registrados en el último año, su departamento seguirá haciendo esfuerzos en una doble dirección: de un lado, seguir implementando medidas, con la colaboración de las corporaciones locales, los puertos y las empresas para atajar la contaminación de origen industrial, más presente en los puertos de Avilés y Gijón y en el entorno de Monteana; y, de otro, poner en marcha con la mayor celeridad planes de movilidad urbanos e interurbanos que apuesten por modos de transporte sostenibles y más ecológicos, en detrimento del vehículo privado.
Ha anunciado también que, de acuerdo a lo contemplado en los planes de calidad del aire, los Ayuntamientos de Gijón y Avilés ya trabajan en el desarrollo de este tipo de estrategias, mientras que el Principado inició en agosto el expediente de contratación del Plan para la Movilidad Multimodal en el Área Metropolitana.
Avilés
En el caso concreto de Avilés, ha valorado la mejora generalizada de entre un 10 y un 20% de media experimentada en el último año en las mediciones de partículas en suspensión en todas las estaciones urbanas, y ha hecho un llamamiento para seguir combatiendo con nuevas medidas los valores todavía negativos que se registran en la estación industrial de Matadero, pese a las cuantiosas inversiones realizadas en el entorno. En este sentido ha anunciado que la consejería revisará las autorizaciones ambientales con que operan las actividades potencialmente contaminantes de la atmósfera a las que exigirá, además, nuevos sistemas de autocontrol.
También se pondrá en marcha, junto con el puerto, un sistema de videovigilancia que permita relacionar los valores de partículas con las operaciones que tengan lugar en el mismo. Las medidas se harán extensivas al benceno, con la exigencia de más y mejores controles en la autorización ambiental integrada de la empresa Arcelor, ya que, si bien los valores se encuentran muy por debajo del límite anual que establece la normativa, estos se han incrementado en fechas recientes.
Gijón
Por lo que respecta a Gijón, la consejera ha destacado lo certero del plan, que ha permitido obtener unos resultados muy buenos, con descensos en la concentración de partículas PM10 en el último año que oscilan entre el 12 y el 22% en el caso de las estaciones urbanas, y que únicamente presentan valores elevados en la zona industrial de Monteana. La consejera ha explicado, no obstante, que se sigue trabajando para mejorar otros indicadores, como las partículas sedimentables o de mayor tamaño, no reguladas por la legislación ambiental y menos perjudiciales para la salud, pero que generan molestias e incomodidad.
Por ello, ha avanzado que en paralelo a otras actuaciones como las inversiones en apantallamientos en el puerto, el Principado convertirá en obligatorias las medidas contempladas como recomendación en las autorizaciones ambientales de las empresas, e incorporarás otras de control de partículas inestables, que resultan muy molestas a la población.
El informe al que se ha referido hoy la consejera puede consultarse en el siguiente enlace:
