Greenpeace ha valorado favorablemente la decisión tomada hoy por la Unión Europea de ratificar el Acuerdo de París sobre cambio climático. Aunque la ratificación formal por parte de cada uno de los organismos de la UE llevará aún una o dos semanas, esta decisión hace casi seguro que el histórico acuerdo entre en vigor dentro de un año desde que se aprobó en diciembre de 2015, ya que 61 países ya lo han ratificado formalmente.
Para la organización ecologista, España queda ahora políticamente obligada a ratificar el acuerdo cuanto antes, para lo que hace falta que el Gobierno presente formalmente en el Congreso el instrumento de ratificación.
“Sería una vergüenza que España no hubiese ratificado el Acuerdo de París cuando se presente en la próxima cumbre del clima en Marraquech”, ha declarado Mariano González Tejada, responsable de la campaña de cambio climático de Greenpeace España. “No nos podemos quedar fuera de juego en la lucha contra el cambio climático”.
“La Unión Europea ha llegado tarde a la fiesta, pero no demasiado tarde. Al ratificar el acuerdo, se ha reservado un asiento en la mesa en la que se deciden las reglas sobre cómo aplicarlo”, ha declarado Jens Mattias Clausen, responsable de la campaña de Cambio Climático de Greenpeace en los Países Nórdicos.
Según el portavoz de Greenpeace, la UE “necesita ahora mirar a sus propios compromisos. No tendrá autoridad moral para moldear las reglas si sus propios compromisos de reducir las emisiones de gases invernadero se quedan por debajo de lo que se necesita para limitar la subida de la temperatura media mundial a 1,5ºC, como se acordó en París.”
Para Greenpeace, la UE tiene que mostrar mucha más ambición en su objetivo de emisiones para 2030 cuando se presente en la primera evaluación mundial de lo avanzado por cada país, que tendrá lugar en 2018. Lo que tiene acordado hasta ahora es absolutamente insuficiente.