La banda, que publicó su primer disco en el año 2013, ha compartido cartel con aristas de la talla de Quique González, Leiva, Mikel Erentxun o Xoel López Juventud, actitud y canciones, sobre todo canciones. Ese es el ADN de DESTINO48, una banda formada en Gijón en el año 2010 y que, a pesar de la corta edad de sus integrantes (entre los 20 y los 25 años), tiene ya una sólida trayectoria a sus espaldas y un sonido propio e inconfundible: el del mejor rock en castellano. Jaime (voz y guitarra), Talo (batería), Medina (guitarra), Jano (guitarra y teclados) y Jorge (bajo) han conseguido hacerse un hueco entre los grupos más prometedores del país a base de esfuerzo y pasión. Su primer disco 'Esto no es un simulacro' (2013) vio la luz gracias al apoyo de cientos de seguidores a través de una exitosa campaña de crowdfounding, que les afianzó como una de las principales bandas del panorama musical asturiano y les abrió las puertas de muchos otros escenarios.
Desde entonces han compartido cartel con aristas de la talla de Quique González, Leiva, Mikel Erentxun o Xoel López, además de realizar una gira nacional con Dani Mateo como parte de su espectáculo "Desencadenado" y participar en festivales de primera línea como el Monkey Week o Metrópoli. Como continuación a esa trayectoria, DESTINO48 presenta hoy 12 de septiembre su segundo disco: 'Sol de invierno', grabado en Subsonic Estudios (Madrid) bajo la producción de Chapo González y Antonio López (M-Clan, Xoel López, Zahara...).
Rock sin etiquetas pero con todos los matices, guitarras que beben de la tradición americana, letras cuidadas y un directo vibrante desde el primer acorde hacen de "Sol de invierno" una declaración de principios, un golpe en la mesa de esta banda que tiene el sonido, tiene la actitud y tiene las canciones para convertirse en un referente en este 2016.