El Colegio Oficial de Podólogos de Asturias aconseja sobre la importancia de una elección de zapato adecuado durante las etapas de crecimiento óseo.
• El 62% de los 600 escolares analizados en un estudio acuden al colegio con calzado para fútbol.
• Un calzado demasiado apretado, como el que se utiliza para la práctica del futbol, puede acarrear deformidades en los pies.
Asturias.-El mes de septiembre está marcado en el calendario de las familias asturianas por la “Vuelta al cole”. Es el momento de la compra del material escolar, libros, nuevos uniformes, y de renovar el calzado de los más pequeños. Desde el Colegio de Podólogos de Asturias queremos recordar la importancia de una elección de zapatos adecuada en una etapa de especial atención, la de desarrollo óseo de los niños.
Desde el Colegio Oficial de Podólogos de Asturias nos vemos en la obligación de realizar esta comunicación tras los alarmantes resultados del Estudio de la Universidad Miguel Hernández de Élche, realizado por el podólogo Roberto Pascual, avalado y divulgado por el Consejo General de Colegios de Podólogos. En dicho estudio se pone de relevancia el abusivo uso de calzado deportivo por parte de los niños, mayoritariamente varones, que acuden al centro escolar. De entre los 600 niños analizados, de entre 3 y 12 años de edad, un 62% acude al colegio de forma habitual con calzado específico para fútbol.
Este tipo de calzado presenta unas características propias ideales para la práctica del fútbol: horma estrecha, suela fina, multitacos, materiales artificiales, y especialmente, un buen agarre para que el pie no sufra mientras se golpea al balón. Es decir, cumplen características biomecánicas, enfocadas a la sujeción y absorción de los golpes. El problema aparece cuando este calzado se utiliza fuera del campo de fútbol. Unos playeros muy apretados favorece las deformaciones del pie, de los dedos en concreto, con la aparición de trastornos como los dedos en garra o los dedos en martillo. Así mismo, las uñas también sufren, y pueden traumatizarse por la excesiva presión, llegando a amoratarse e incluso perderse. ??
El podólogo Roberto Pascual, autor del estudio, advierte de la importancia de una elección adecuada en las fases de desarrollo óseo de los niños. Utilizar zapatos incorrectos durante la edad escolar repercute en la salud de nuestro cuerpo, favorece la aparición de problemas y dolores de rodillas y son, entre otros, el germen de malas posturas que acaban pasando factura a lo largo de nuestra vida. El Colegio de Podólogos de Asturias recuerda la importancia de acudir a su podólogo de cabecera para buscar consejo. El podólogo te aconsejará y guiará en la elección de calzado adecuado y saludable para tu hijo:
Queremos compartir con vosotros unas recomendaciones a la hora de elegir el calzado de nuestros hijos dependiendo de la etapa o edad en la que se encuentren:
1. Menos de un año: El calzado tiene una función de protección térmica. Es importante que sean de material flexible, que permita el movimiento en todas las direcciones, así como estar fabricados con fibras naturales, para cuidar la piel y la transpiración de los más pequeños.
2. El niño empieza a gatear: Durante esta etapa es necesario que el zapato permita movilidad en todas las direcciones, así como ofrecer unas zonas de agarre que permitan al niño empujar y desplazarse.
3. El niño empieza a caminar: El foco de nuestra atención debe estar sobre la suela: flexible, antideslizante, transpirable, adaptada al pies y blanca, pero con contrafuerte rígido en el talón.
4. Menos de siete años: Es importante que en esta etapa de mucho movimiento el zapato proteja contra traumatismos y ofrezca una protección contra el frío. Los materiales nobles y las suelas flexibles ofrecen buena sujeción. El Colegio de Podólogos de Asturias apuesta por los cierres flexibles, que favorecen la autonomía del niño.
5. A partir de los siete años: Introducimos elementos de sujeción como los cordones. La actividad de nuestros hijos aumenta, y es importante que su calzado proteja del tejido adiposo, especialmente vulnerable en la suela de los pies.
FOTO: http://podologosasturias.com