La caries, la gingivitis y los traumatismos orales, junto con la halitosis, el sangrado y la hipersensibilidad, son los problemas bucodentales más frecuentes en verano

Una inadecuada higiene bucodental y las altas temperaturas facilitan la proliferación de bacterias orales en verano

Oviedo.- Con la llegada de la época estival los hábitos de la población cambian: se come más fuera de casa, se consumen más alimentos poco saludables para los dientes y se modifican las actividades diarias. Estos cambios, junto a las altas temperaturas, provocan la proliferación de bacterias en la boca que pueden provocar un aumento de patologías bucodentales como la caries o la gingivitis, que pueden causar halitosis, sangrado de encías o hipersensibilidad dental. El Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Asturias (CODES) recomienda intensificar la higiene bucal durante el verano y no olvidarse de emplear el hilo dental, colutorio, chicles sin azúcar y con xilitol, y fotoprotector labial para mantener una buena salud bucodental.

Beber mucha agua e hidratarse es fundamental para el correcto funcionamiento del organismo. En una boca deshidratada es más frecuente que existan infecciones, por lo que desde CODES se recomienda beber dos litros de agua al día y tomar alimentos con alto contenido hídrico como las verduras, hortalizas y frutas.

Además, hay alimentos de temporada que ayudan a cuidar la salud bucodental, como  la sandía y el melón, además de contener más del 90% de agua, por lo que también ayudan a estar hidratado y evitar así que se produzca un aumento de la densidad de la saliva.

El presidente de CODES, Javier González Tuñón, considera “importante controlar el consumo de alimentos y bebidas azucaradas que aumentan con la llegada del verano, como refrescos azucarados, alcohol, helados… Estos alimentos elevan los niveles de ácidos que dañan el esmalte, favoreciendo la aparición de caries”.

CODES también recomienda precaución en la práctica deportiva. Con la llegada del buen tiempo es más frecuente realizar actividades al aire libre por lo que el riesgo de sufrir golpes en los dientes es mayor. De hecho, en estas fechas se produce un aumento de patologías de origen traumático, especialmente en niños, en los que los traumatismos y fracturas de dientes aumentan en torno al 30%. En estos casos, el CODES aconseja actuar lo más rápidamente posible, conservando el diente en suero salino, o en su defecto agua, agua con sal, leche, o manteniéndolo en la boca y acudir de forma urgente a un dentista para poder llevar a cabo el tratamiento más adecuado.

También es necesario proteger la boca del sol. En cuanto a la protección solar, al igual que en el resto del cuerpo, no hay que olvidar proteger también los labios de la excesiva exposición al sol con un fotoprotector para ayudar a prevenir así el cáncer en esta parte de la boca