La Consejería de Servicios y Derechos Sociales ha abierto esta semana un proceso de habilitación excepcional dirigido al personal de más de 55 años que trabaja en Asturias como cuidador, gerocultor o auxiliar de ayuda y que antes de que concluya 2017 deberá contar con titulación o una acreditación para ejercer su labor en centros que prestan servicios de atención a la dependencia.
La medida persigue garantizar que este colectivo pueda seguir desarrollando su trabajo, según ha informado el Gobierno asturiano a través de una nota de prensa. El Principado es la tercera comunidad que ha publicado la convocatoria, tras el País Vasco y Castilla-La Mancha.
Los interesados deben acreditar una experiencia de al menos tres años, con un mínimo de 2.000 horas trabajadas en esas categorías en los últimos 10 años.
La convocatoria, en la que se recogen todos los requisitos, se publicó en el BOPA el pasado 31 de mayo, y la tramitación puede llevarse a cabo personalmente o a través de la web del Principado de Asturias hasta el 31 de octubre.
En Asturias, según los datos recabados conjuntamente por la propia Administración, los sindicatos, la patronal y las principales entidades privadas del sector, requieren acreditación unos 1.500 profesionales.
La Consejería de Servicios y Derechos Sociales se encargará de la acreditación excepcional de una parte de ellas, concretamente las mayores de 55 años, y el resto deberá pasar por procesos ordinarios, que llevarán a cabo los servicios de empleo de las comunidades o el Estado. Esta última cuestión aún está pendiente de concretar