USAL/DICYT La investigadora mexicana Rosario Mirabal realiza el Doctorado en Lógica y Filosofía de la Ciencia de la Universidad de Salamanca con el fin de investigar las claves de la cultura científica en su país, especialmente, la que se transmite a través de la educación secundaria. En el Instituto de Estudios de la Ciencia y la Tecnología (eCyT) encuentra expertos en este campo y otros doctorandos que aportan visiones complementarias.
“Pretendo conocer la cultura científica de la sociedad mexicana a través de los libros de texto y de las encuestas de percepción pública que realiza el gobierno mexicano”, comenta. No se trata de analizar el contenido de las asignaturas, sino más bien de estudiar las implicaciones que tiene.
“Mientras que en España nos encontramos con ciencia pura y dura, los textos mexicanos incorporan otras aportaciones”, asegura. Los conocimientos ancestrales y el interés por temas muy específicos como la obesidad son características muy locales que no aparecen en otros países. De esta forma, los libros escolares “tienen mucho que ver con el carácter cultural de una nación”.
En cuanto a los estudios sobre la percepción de la ciencia, el objetivo de Rosario Mirabal es implementar una encuesta propia, precisamente, dirigida a estudiantes de educación secundaria. De esta forma, podrá contrastar los resultados con el análisis de los libros de texto.
Tras estudiar Física, esta joven investigadora encontró en la divulgación científica su camino gracias al Máster en Estudios Sociales de la Ciencia y la Tecnología. “Ya desde la carrera trabajé con niños y jóvenes en talleres e hice varios estudios sobre divulgación, así que vine aquí porque el máster encajaba con todos mis intereses, como la comunicación de la ciencia y la política científica”, destaca. “Tenía formación científica pero me faltaba complementarla con estas materias y, una vez aquí, decidí centrarme en la cultura científica relacionada con la educación”, añade.
Su tesis doctoral servirá para entender mejor los sistemas de ciencia, tecnología e innovación de México, ya que la enseñanza secundaria es la base de la futura ciencia del país”. Aunque existen grupos de investigación que trabajan en torno a la cultura científica en su tierra, Rosario Mirabal valora especialmente la masa crítica que el Instituto eCyT ha generado en este campo. “Vienen muchos especialistas y mis compañeros, que proceden de muchos países de Latinoamérica, ayudan a ofrecen una perspectiva más rica”.