Llamazares rechaza la propuesta de tiempos mínimos del PP que tilda de "oportunista y privatizadora"

Llamazares rechaza la propuesta de tiempos mínimos del PP que tilda de "oportunista y privatizadora"

El portavoz de IU cree un escarnio que quienes dispararon con los recortes las listas de espera promuevan ahora un nuevo nicho de mercado para la iniciativa privada

 

El portavoz de IU en la Junta General del Principado, Gaspar Llamazares, tildó hoy de “oportunista y privatizadora” la iniciativa del Partido Popular sobre tiempos mínimos en sanidad. Llamazares explicó que, tras una legislatura de recortes, que está en el origen de la explosión de las listas de espera, el PP pretende ahora hacer negocio abriendo la puerta a privatizaciones apoyándose en las demoras que ellos mismos generaron.

 

De hecho, a juicio del parlamentario, la propuesta popular permite aprovechar el problema de las listas de espera para generar un nuevo nicho de mercado para la iniciativa privada. “Creemos que, muy al contrario, lo que hay que hacer es consolidar el sistema sanitario público y mejorar su gestión para que las listas de espera sean lo menor posible. Hay que decir que las listas de espera actuales se han disparado como consecuencia de la política de recortes y ajustes impulsada por el PP. Suena un tanto a escarnio que el propio partido que ha promovido estos recortes y ajustes y que ha facilitado el desboque de las listas de espera en prácticamente todas las Comunidades Autónomas nos proponga ahora rentabilizarlas para el sector privado”.

 

Llamazares anunció que su grupo rechazará la propuesta pues, a su juicio, no resuelve el problema de las listas. “Preferimos un tratamiento de las causas, no un tratamiento de la fiebre. Las listas de espera son la fiebre del sistema sanitario público. Es verdad que hay que bajar la fiebre, y para eso habrá que adoptar medidas que tengan que ver fundamentalmente con la gestión de las listas, pero lo que hay que tratar es el origen de la fiebre”.

 

El rechazo a la propuesta de tiempos mínimos se justifica también por el fracaso que medidas similares cosecharon en otras Comunidades Autónomas que, sin ser capaces de resolver las listas de espera incrementaron exponencialmente los costes.

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