Tras autorizar CUOTA la instalación por cuatro años, el Ayuntamiento de Llanes permite un chiringuito de temporada debajo del paseo de San Pedro y sobre la playa de El Sablón

Después de que el propietario obtuviera la autorización, por cuatro años, de la Demarcación de Costas en Asturias, organismo que previamente remitió el expediente a la Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio de Asturias (CUOTA), donde recibió una respuesta favorable; el Ayuntamiento de Llanes ha dado el visto bueno a la apertura de un chiringuito de temporada en la zona situada entre el paseo de San Pedro y la playa de El Sablón.

No obstante, el Consistorio llanisco, debido a la situación de inestabilidad del terreno donde se prevé colocar esta instalación desmontable de temporada, habiéndose producido en este lugar derrumbes de piedras desde el año 2011 que obligaron al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente a ejecutar un proyecto para reforzar la ladera; encargó un estudio geológico para verificar el grado de estabilidad del terreno y sus posibilidades de futuro para realizar una actuación hostelera de este tipo.

Además, el Ayuntamiento de Llanes, junto a este estudio geológico y de estabilidad de la ladera, ha efectuado todas las comprobaciones legales, técnicas y de seguridad con el objeto de que no haya ninguna anomalía ni irregularidad en la tramitación de la petición de la licencia para que se pueda instalar, con todas las garantías, este chiringuito de temporada.

Tras revisar de manera pormenorizada toda la documentación y asegurarse de que, efectivamente, cumple con todos y cada uno de los requisitos contemplados en la normativa técnica y jurídica, el Ayuntamiento de Llanes, como no podía ser de otra forma, ha procedido a conceder la correspondiente licencia.

Lo contrario, de negar al solicitante el permiso para llevar a cabo la instalación de un bar de temporada, desmontable, en el emplazamiento indicado entre el paseo de San Pedro y la playa de El Sablón, disponiendo de todos los permisos necesarios para ello, el Ayuntamiento llanisco podría incurrir en un delito de prevaricación y de posible responsabilidad patrimonial.