Pocas veces dos equipos llegan tan necesitados a un mismo partido. El lunes, el Levante y el Sporting de Gijón jugarán una ‘final’ adelantada por la salvación. Ambos conjuntos están separados por solo tres puntos, así que el resultado del encuentro marcará el devenir de los dos conjuntos, cuando sólo quedan ocho jornadas para el final y veinticuatro puntos en juego. El Levante es el colista con veinticuatro puntos, pero si gana empatará con el Sporting y recortará la distancia que le separa de la permanencia (cuatro puntos). El conjunto rojiblanco, por su parte, es penúltimo con veintisiete puntos (a uno de la salvación), por lo que si gana el lunes en el ‘Ciudad de Valencia’ dejaría muy ‘tocado’ al Levante, y continuaría muy vivo en la pelea por la salvación. Un empate, sin embargo, no les serviría prácticamente de nada a ninguno de los dos, especialmente si los rivales que tienen por encima -Granada, Getafe y Rayo Vallecano (que protagonizarán este fin de semana otra duelo directo)- puntúan esta jornada.

El Sporting de Gijón ‘aterrizará’ el lunes en el ‘Ciudad de Valencia’ confiado tras la última victoria, lograda hace quince días (el pasado fin de semana no hubo Liga) frente al Atlético de Madrid. El equipo que dirige Abelardo ganó, contra todo pronóstico, al conjunto ‘colchonero’, lo que le permitió alejarse del Levante y romper la racha de cuatro derrotas consecutivas que había encadenado. Después de ocho jornadas sin ganar, el triunfo frente al Atlético de Simeone fue todo un balón de oxígeno que podría cobrar aún más importancia si los rojiblancos vuelven a ganar este lunes. Aunque no será fácil. El Sporting se enfrentará al Levante con la defensa en ‘cuadro’. Abelardo no podrá contar con tres de sus cuatro titulares habituales: Bernardo, que dijo adiós a la temporada hace varias semanas por lesión; Álex Menéndez, que sufre un esguince en la rodilla derecha; y Meré, que deberá cumplir un partido de sanción. Vrajnes, Lichnovsky y Luis Hernández podrían ser sus sustitutos en el ‘once’. Que el trascendental choque del lunes se dispute a domicilio, y no en ‘El Molinón’, tampoco beneficiará al Sporting, ya que el conjunto rojiblanco suele ofrecer lejos de Gijón su peor versión. Como visitante, el equipo de Abelardo sólo ha ganado tres partidos y ha empatado otros dos, mientras que ha perdido diez. De hecho, el Sporting no gana lejos de ‘El Molinón’ desde el pasado 31 de enero, cuando venció (0-1) al Valencia en ‘Mestalla’.

Pese a ser el colista, el Levante no es un rival fácil de ganar en su estadio, donde ha sumado dieciocho de los veinticuatro puntos que tiene en su casillero tras ganar cinco partidos, empatar tres y perder siete. El conjunto azulgrana viene de perder en el campo del Deportivo de La Coruña, pero su rendimiento, desde el mercado de invierno, ha mejorado mucho tras una primera vuelta desastrosa. El Levante ocupa la última posición, pero ahora (por los enfrentamientos directos) depende de sí mismo para quedarse en Primera, aunque ni siquiera la salvación tapará las miserias de una temporada nefasta en la que el proyecto deportivo ha sido un absoluto fracaso. Después de cinco campañas consecutivas en Primera División (un record para la entidad), el Levante diseñó el pasado verano, con Lucas Alcaraz al frente, una plantilla para alcanzar la salvación sin los apuros de otras ocasiones, pero el rendimiento no fue el esperado. De hecho, Lucas Alcáraz fue destituido el pasado mes de octubre, cuando llegó el técnico Rubi, que todavía no renuncia al objetivo. Y buena parte de sus esperanzas pasan por el encuentro del lunes, para el que es duda el azulgrana Rubén García, con una sobrecarga en su abductor izquierdo.

La última vez que el Sporting visitó el ‘Ciudad de Valencia’ para medirse al Levante fue en la temporada 2011-2012. En aquella ocasión, el conjunto rojiblanco recibió un duro castigo al perder por cuatro goles a cero, pero el partido se disputó en la jornada catorce, así que la derrota no tuvo más consecuencias que los tres puntos que el Sporting se dejó en tierras valencias. Pero mañana, con la permanencia en juego, el encuentro será a ‘cara de perro’.