Mañana lunes dan comienzo las pruebas del 47 Trofeo Princesa Sofía IBEROSTAR de vela olímpica, en una de sus ediciones más especiales, por ser por primera vez clasificatoria para los Juegos Olímpicos y por registrar el récord de participación de países, con hasta 68 naciones compitiendo en aguas de la bahía de Palma hasta el próximo sábado. Algunos lo harán con la angustia de luchar por la última plaza disponible para Río 2016, otros con la presión de la selección olímpica interna de cada nación. Algunos con la tranquilidad de estar ya clasificados y seleccionados para la cita brasileña, otros con la mirada puesta ya en Tokio 2020.

Entre los españoles, compiten en el Trofeo Princesa Sofía IBEROSTAR tres tripulaciones que ya tienen su pasaporte sellado con el logo de Río 2016: la windsurfista sevillana Marina Alabau en RS:X F, la pareja gallego cántabra formada por Támara Echegoyen y Berta Betanzos en 49er FX, y los hermanos asturianos Federico y Arturo Alonso en 49er.

En RS:X F, la representante española en Río 2016 será la actual campeona olímpica, Marina Alabau. La sevillana compite en aguas de la bahía de Palma, con base en el Club Marítimo San Antonio de la Playa, con el objetivo de estar entre las mejores en un campo de regatas que se le da bien: le ha dado un oro, dos platas y dos bronces. Hoy ha dedicado la jornada a formalizar la inscripción y a entrenar en bicicleta.

Echegoyen y Betanzos han sido duda hasta última hora. Las vigentes campeonas mundiales de 49er FX, componentes del equipo Movistar, se lesionaron hace unas semanas en el Arenal Training Camps Trophy. “El barco volcó y Támara se lesionó el pie derecho y yo tuve una rotura en uno de los tres ligamentos del tobillo. Gracias al trabajo duro de Luis Morales, fisioterapeuta de la Federación, me he recuperado para estar en las mejores condiciones en esta competición”, ha señalado la cántabra. “El Sofía IBEROSTAR -ha añadido, por su parte, la patrona gallega- es la mejor regata para poder comprobar cómo estamos después del Mundial, ya que aquí competirán ocho o nueve tripulaciones que pueden hacerse con una medalla en Río”.

Si ellas han confirmado su participación en el Trofeo Princesa Sofía IBEROSTAR, en Nacra 17 Iker Martínez y Julia Rita han decidido hoy que al final no toman parte en la competición balear, debido a la lesión de rodilla que sufrió el bimedallista vasco en el pasado Mundial de Florida, en febrero, por el abordaje de un barco rival. La regata mallorquina es la segunda de las tres regatas de selección que tiene el Nacra 17 español para los Juegos -la primera fue el Mundial-, pero Martínez no está al cien por cien para poder competir, y además el hacerlo podría suponer el agravar la complicada lesión que padece, para la que normalmente se necesita medio año de recuperación. De esta forma, Fernando Echávarri y Tara Pacheco tienen vía libre para ganar el pase para Río, aunque esta complicada selección entre estas dos figuras de la vela española podría seguir abierta de una forma u otra en los despachos, en opinión del jefe del equipo olímpico español de vela, Toni Ripoll.

También en la clase 49er la selección española para Río ha sido complicada. En el pasado Mundial los hermanos asturianos Federico y Arturo Alonso se hacían con el preciado pasaporte olímpico, por delante del joven tándem formado por el cántabro Diego Botín y el gallego Iago López. Esta semana la Real Federación Española de Vela ha confirmado el resultado del ranking, por lo que Botín y López ya miran a Tokio 2020, mientras que los Alonso por fin podrán saborear el regalo olímpico tras tantos años de trabajo. “Ha sido duro, pero estamos muy contentos, hemos conseguido lo que perseguíamos desde hace tanto tiempo. Ahora toca seguir trabajando para llegar a Río con las máximas opciones”, han señalado los asturianos.

Como Diego Botín y Iago Lopez, otros jóvenes regatistas tienen la mirada puesta en Tokio 2020, mientras aspiran a codearse con los más grandes en el 47 Trofeo Princesa Sofía IBEROSTAR. Es el caso, por ejemplo, de la pareja de 470 F formada por la catalana Silvia Mas y la mallorquina Paula Barceló, que compiten por el Club Nàutic S’Arenal. “El pasado Mundial fue la primera regata de selección para Río, y no nos fue bien -ha admitido Barceló-. Tras el Princesa Sofía IBEROSTAR se celebrará la segunda y última regata puntuable, el Europeo de la clase, también en S’Arenal. Daremos lo máximo pero somos conscientes de que llevamos sólo un año navegando juntas, y además yo antes iba de patrona. Tokio es nuestro objetivo, la de Río no es nuestra lucha”. Las componentes del equipo Movistar opinan que la batalla estará muy apretada, entre las catalanas Bàrbara Cornudella y Sara López, la asturiana Ángela Pumariega y la canaria Patricia Cantero, la mallorquina Marina Gallego y la murciana Fátima Reyes, y la gallega Sofía Toro y la catalana Nora Brugman.

En 470 M, con las mismas regatas selectivas para Río 2016, los canarios Onán Barreiros y Juan Curbelo lideran el ranking por delante de los catalanes Jordi Xammar y Joan Herp, pero con poca diferencia. Ambas tripulaciones se centrarán en el Princesa Sofía IBEROSTAR en acabar de preparar el asalto final, que será el Europeo, a disputarse en estas mismas aguas del 5 al 12 de abril.

Algo más de 700 embarcaciones competirán mañana en aguas mallorquinas, las participantes en las diez clases olímpicas. El miércoles empiezan a competir las flotas de la clase paralímpica 2.4mR y de la invitada Dragón, con base en el Real Club Náutico de Palma, y que completan las cifras de participación de la regata mallorquina hasta los cerca de 800 barcos -datos definitivos pendientes del cierre de inscripción esta noche-.